El sector educativo ha ganado la batalla al coronavirus. Aunque la sensación generalizada en septiembre era que los colegios no iban a durar ni un mes con las puertas abiertas, lo cierto es que ahora todos los agentes educativos califican como «un éxito» el curso que acaba esta semana con una «incidencia muy baja» en cuanto a contagios, como coinciden en señalar representantes de la comunidad educativa. Avalan la presencialidad como el modelo educativo por el que se apostó principalmente en el inicio del curso y señalan el esfuerzo, la implicación y la responsabilidad que ha supuesto para toda la comunidad educativa.
La consejera de Educación, Rosa Ana Rodríguez, se pronunció el pasado viernes a este respecto e hizo un balance «bastante positivo» del curso escolar en Castilla-La Mancha. Afirmó que la educación «ha ganado la batalla a la pandemia» gracias al esfuerzo y la responsabilidad de toda la familia educativa. Indicó que el coronavirus «ha hecho poca mella» en los centros, que no han superado en ningún momento el 1 por ciento de incidencia.
«Ha sido un curso totalmente exitoso», afirmó a este diario la presidenta de ANPE Ciudad Real, Mónica Sánchez de la Nieta, que atribuyó ese éxito, en primer lugar, a los docentes, de los que habló como una «pieza clave» que han sabido transmitir la responsabilidad a los estudiantes para evitar la propagación del virus y, en segundo lugar, a los propios alumnos, que han mostrado su compromiso con el cumplimiento de las medidas sanitarias, por lo que aseguró que son merecedores de un «auténtico aplauso».
Del mismo modo, subrayó la labor de los equipos directivos y de los coordinadores COVID al combinar sus funciones con los protocolos totalmente nuevos a los que se tuvieron que enfrentar en este año de la pandemia. «La presencialidad ha funcionado», dijo, si bien recordó que también se ha desarrollado a partir de 4 de la ESO la semipresencialidad y abogó para que el curso que viene siga habiendo refuerzos para alumnos cuyo rendimiento no ha sido todo lo alto que se esperaba. «La Administración debe apostar por la bajada de ratios si es posible y si no, por el refuerzo educativo», aseveró la representante de ANPE.
También desde el sindicato CSIF su representante en Educación, José Antonio Ranz, afirmó que «el curso ha finalizado de forma más o menos satisfactoria por el buen hacer de los docentes y equipos directivos, así como de las familias y la responsabilidad de los alumnos», mientras que echó en falta que la Consejería regional ofreciera «certezas» al inicio del curso en cuanto a la búsqueda de espacios, pero también en situaciones como la derivada de la borrasca Filomena o en el proceso de vacunación de los docentes.
«Gana por goleada la presencialidad», afirmó a este diario la secretaria de la FAPA, Toñi Portillo, en referencia al modelo educativo que considera que ofrece mejores resultados para los alumnos, también en este curso marcado por la pandemia en el que cree que las clases online deben ser «una herramienta más», pero no la principal, reconociendo a renglón seguido que «nadie esperaba un buen resultado al principio, pero ha habido menos incidencia de la que todo el mundo pensaba que iba a haber».
Para ello, el cumplimiento de las medidas de seguridad ha sido una constante. De principio a fin se han aplicado los protocolos para evitar la propagación del virus en las aulas. Así, nada más llegar al centro se ha tomado todos los días la temperatura a los alumnos, después se han tenido que aplicar gel hidroalcohólico y ya en las clases ha sido obligatorio el uso de la mascarilla todo el tiempo y la ventilación. Sobre estas medidas se pronunció la secretaria de la FAPA y destacó el compromiso de los padres para no llevar a los niños al colegio si tenían fiebre. «Ha habido pocas devoluciones en caliente», dijo en referencia los niños que tenían que ser mandados a casa desde la puerta del colegio por superar la temperatura establecida. «Han funcionado los rastreadores y los grupos burbuja», agregó, asegurando que la adaptación de todos a la nueva situación que impuso el COVID ha permitido ganarle el pulso a la pandemia.
También desde el Colegio Nuestra Señora del Prado (Marianistas), su director, Javier Poncela, afirmó que ha sido «un curso excepcional, mejor de lo que pensábamos», ya que ha habido «muy pocos casos» y se ha superado con satisfacción este curso marcado por la pandemia en el que han apostado en este centro porque fuera «todo presencial». Eso se ha traducido en los buenos resultados que han cosechado los alumnos en la EvAU, concluyó el también presidente provincial de Escuelas Católicas.
«Con muchas dificultades por todas las medidas de seguridad, pero estamos muy contentos». Así resumió Juan García, director del IES Hernán Pérez del Pulgar, el curso que acaba el viernes. Considera que la ventilación, junto a la mascarilla, han sido dos de los factores que más han contribuido a que la incidencia del COVID haya sido «muy baja, mínima a partir de enero» en las aulas. Felicitó a todos los centros educativos por la labor que han desarrollado, «no sin esfuerzo y dificultad», al tiempo que destacó la «madurez y sensatez» que han demostrado los alumnos.