El PP considera que está en marcha un proceso de ‘cierre de agenda’ en la atención sanitaria de especialista, por el que se impide entrar a más pacientes en lista de espera, y llama a los pacientes que pudieran verse afectados por esto a protestar. Así lo trasladaba  la senadora Carmen Riolobos en una rueda de prensa ofrecida en las Cortes regionales.

Riolobos invitó a los pacientes a los que no se les incluya para recibir tratamiento especializado a que adopten acciones para obligar al Sescam a que figuren en las listas de espera sanitaria.

La senadora trasladó estos consejos si un paciente se encuentra con que no se le da cita para un tratamiento con la excusa de que la agenda para el servicio que precisa está cerrada. Lo primero, exigir al funcionario que pretexte un cierre de agenda la inclusión en la lista de espera correspondiente al servicio. «Te tienen que incluir», manifestó Riolobos, quien avisó al paciente afectado que «puede pasar un mes en el limbo de los justos». El segundo consejo es acudir al servicio de atención al paciente más cercano para presentar una reclamación por lo ocurrido. Y el tercer consejo dado por Riolobos es incluir en esa reclamación la advertencia a la dirección del hospital donde pueda ocurrir este problema de que en caso de que de la no inclusión en lista de espera se derivaran secuelas irreversibles para el paciente «llevaremos el asunto a los tribunales».

La senadora ‘popular’ acusó al Ejecutivo de García-Page, remitiéndose a lo que le habrían dicho profesionales sanitarios, de decretar el cierre de agendas en atención sanitaria especializada hasta junio, una vez pasadas las elecciones autonómicas. Incidió en que esta es una de las tácticas del Gobierno regional para «falsear y maquillar» las listas de espera, con el fin de disimular su extensión. Señaló, como han hecho antes otros responsables de su partido, que el número de pacientes real en estas listas es de unos 250.000, y no menos de 100.000 como recogen las estadísticas oficiales del Sescam.

Atención primaria y ambulancias.

Otra denuncia en materia sanitaria hecha por Riolobos versó sobre la atención primaria, de cuyos profesionales dijo que están «desmotivados» debido a la falta de medios y personal para efectuar su labor. Apuntó que esto complica la situación sanitaria en su conjunto, al ser los centros de salud «la puerta de entrada» a la atención sanitaria y donde se debe dirigir al paciente para su mejor tratamiento.

Riolobos también recordó los problemas con las concesionarias del servicio de ambulancias del Sescam. Calificó el estado de los vehículos empleados para el transporte sanitario en la región como «tercermundista».