La empresa García Carrión (Avival) señaló ayer que no asistió a la pasada reunión de la junta directiva de la Asociación Interprofesional de la Denominación de Origen Valdepeñas, celebrada el viernes de la semana pasada, día 12 de junio, «haciendo público su apoyo a todas las asociaciones agrarias» y manifiesta su adhesión al comunicado de la Asociación Agraria de Jóvenes Agricultores (Asaja), la Coordinadora de Organizaciones de Agricultores y Ganaderos (COAG), la Unión de Pequeños Agricultores y Ganaderos (UPA) y Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha «ante el bloqueo existente en la junta directiva de la DO».
Según indicó ayer a través de un comunicado, García Carrión «quiere además aclarar que la actual situación de la DO (Denominación de Origen) Valdepeñas no se debe a una guerra comercial entre Félix Solís (Asevivaldepeñas) y García Carrión (Avival), como se quiere transmitir por aquellas personas que tienen poder en solucionarlo».
En su escrito, García Carrión añade que esta firma «no solo se suma al sector productor, sino que además ha impugnado judicialmente los estatutos de la DO Valdepeñas por ser antidemocráticos y permitir a Félix Solís (Asevivaldepeñas) vetar todas las medidas de transparencia que se han propuesto en el seno de la DO contra el fraude denunciado».
Cabe recordar que Asaja, COAG, UPA y Cooperativas Agro-alimentarias de Castilla-La Mancha pidieron este lunes públicamente cambios inmediatos en los estatutos para que se recupere la capacidad de gestión de la junta directiva de la DO Valdepeñas, ahora vetada por una sola organización del sector comercializador.
El sector productor anunció que tiene intención de darse de baja en la junta directiva de la Denominación de Origen Valdepeñas «ante la imposibilidad de poder cambiar el rumbo y el funcionamiento de ésta, que durante los últimos años se ha visto sometida a una paralización casi total de su capacidad de gestión».
Según alega el sector productor, esta paralización de la capacidad de gestión de la entidad se debe a la guerra comercial abierta entre las principales empresas que conforman dos de sus principales asociaciones de la rama comercializadora (Asevivaldepeñas y Avival).
Dicho enfrentamiento ha subido de intensidad en los últimos meses, con numerosos reproches y denuncias cruzadas entre los mismos operadores acusándose recíprocamente de graves irregularidades en la comercialización de los vinos, en especial, en el etiquetado identificativo de la calidad del vino conforme a las normas contenidas en el pliego de condiciones para los vinos con Denominación de Origen Valdepeñas.