El Ayuntamiento de Alcázar de San Juan ejecutará a lo largo del próximo año obras de rehabilitación en los cuatro molinos de viento del cerro de San Antón y en el resto de Bienes de Interés Cultural (BIC) de titularidad municipal: el Museo Casa del Hidalgo, el conjunto palacial del Gran Prior, la antigua fonda de la estación de ferrocarril y el Museo Municipal. También actuará en otros recursos turísticos de la ciudad, como el Museo de la Alfarería de La Mancha (Formma), la Cueva del Polvorín y los yacimientos arqueológicos.
Estas acciones de rehabilitación se encuadran en un proyecto global en el que el Consistorio alcazareño invertirá 285.000 euros, cofinanciados al 80% por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional en el marco del Programa Operativo Feder Castilla-La Mancha 2014-2020. La primera actuación, adjudicada hace solo unos días, tendrá a los cuatro molinos de viento del cerro de San Antón (Rocinante, Fierabrás, Dulcinea y Barcelona) como protagonistas. Cuenta con un presupuesto de 33.000 euros.
En declaraciones a La Tribuna, el técnico municipal Diego Vaquero explica que los trabajos abarcarán desde las cubiertas hasta las aspas y los palos de gobierno de los molinos, maquinaria muy delicada por el paso de los años y las inclemencias meteorológicas. «Aparentemente se encuentran bien, pero necesitan una renovación importante», afirma para subrayar que actualmente es el recurso turístico de Alcázar de San Juan que más visitantes recibe, por delante del Museo Casa del Hidalgo.
Hoy sólo se conservan cuatro de los 19 molinos de viento y dos de agua que llegó a tener la ciudad. Dos de estos ingenios mecánicos se musealizaron en su día, uno como centro de interpretación del paisaje manchego; y otro que alberga una reconstrucción de la maquinaria original del siglo XVI y que realiza moliendas tradicionales en diversas fechas del año. El 27 de abril de 2017, con una inversión de 150.000 euros de la Junta de Comunidades, los molinos de viento estrenaron nueva iluminación artística, con el fin de mejorar y aportar un valor añadido a estos monumentos manchegos por excelencia.
Será la intervención más simbólica de este proyecto, pero no la única. La Concejalía de Turismo, con Bárbara Sánchez-Mateos al frente, también acometerá obras de mejora en el resto de BIC de titularidad municipal, entre los que destaca el Museo Casa del Hidalgo, una antigua casa solariega del siglo XVI, conocida por el nombre de Casa del Rey, que muestra cómo era la vida de los hidalgos que inspiraron a Miguel de Cervantes cuando creó el personaje de Don Quijote de La Mancha. Cuenta con la exposición de piezas originales de gran valor, cedidas por importantes museos españoles.
El departamento que dirige Sánchez-Mateos también intervendrá en el Museo Municipal de Alcázar, un edificio fruto de la unión de dos elementos patrimoniales de la ciudad que tienen su origen en el siglo XVII: los restos de la antigua casa solariega de la familia Sanabria y de la antigua ermita de Santo Domingo Soriano. Y en la antigua fonda de la estación del ferrocarril, cuya azulejería singular, de inicios del siglo XX y que reproduce imágenes quijotescas de 11 capítulos de la novela de Cervantes, fue declarada BIC por el Gobierno regional.
Vaquero explica que estos trabajos, a los que se unirán otros en recursos turísticos como el Formma y los yacimientos arqueológicos, tienen un plazo de ejecución máximo hasta noviembre de 2020, ya que en diciembre hay que justificar las obras ante Bruselas.