El juez de Primera Instancia e Instrucción número 1 de Tomelloso ha acordado el archivo provisional de las diligencias abiertas por el fallecimiento de personas residentes en Elder, el centro de mayores de Tomelloso. Ocurrió en plena pandemia, los familiares denunciaron al director del centro y le acusaron de un presuto delito de homicidio por imprudencia en relación con omisión del deber de socorro. El juez instructor ordenó la apertura de actuaciones, diligencias previas para recabar toda la documentación de interés en la investigación para esclarecer los hechos.
Ahora acaba de dictar un auto, al que ha tenido acceso La Tribuna, en el que archiva de forma provisional las actuaciones. En la resolución del juez, con mucha fundamentación, se recoge toda la secuencia de hechos, la cronología de la pandemia, las recomendaciones iniciales, a celebración del carnaval y otros actos previos al estado de alarma. A la vista todo, documentación y declaración de los testigos, el juez en su detallado auto concluye que la actuación (u omisión) del director del cento discurría en línea con el sentir o la percepción general de la población y de las propias autoridades sanitarias, que infravaloraron la capacidad destructiva del nuevo virus según se advirtió a posteriori. La situación producida en la residencia Elder obedeció a un "cúmulo" de circunstancias desafortunadas, según el instructor.
El abogado de las familias de algunos fallecidos ya ha anunciado que va a recurrir el auto del juez. La Fiscalía está estudiando interponer un recurso, según ha podido saber este diario. Tienen tres días para ello.

(Habrá ampliación)