El Villarrubia acaba con el gafe en casa

Manuel Espadas
-

2
Villarrubia
1
Real Murcia
Finalizado
Los goles de Dieguito y Andriu le dan la vuelta al marcador ante un Real Murcia en inferioridad y permiten al equipo manchego estrenar su casillero de victorias como local (2-1)

Dieguito es abrazado por sus compañeros tras conseguir el gol del empate. - Foto: Alberto Beamud (Asociación EÑE TVI)

Después de siete intentonas frustradas, el Villarrubia lo consiguió. Los goles de Dieguito y Andriu le daban a los de Javi Sánchez los tres puntos en su primera victoria como local en Segunda División B, ante un Real Murcia penalizado por la expulsión de Algar en el tramo final de la primera parte. Un triunfo con doble valor, que rompe una racha de cinco jornadas in ganar de los manchegos, y que les acerca a su objetivo de evitar el descenso de categoría. 

Pese al frío ambiental, el partido comenzó de un modo electrizante. Apenas había dado tiempo a que los aficionados ocuparan en su totalidad las localidades y que los jugadores dibujaran sobre el césped los respectivos planteamientos tácticos de los entrenadores cuando se movía el marcador por primera vez. No se había llegado al segundo minuto cuando el capitán pimentonero, Armando, sorprendía al primer palo al meta Samu Diarra en un lanzamiento directo desde la esquina izquierda del área grande. No podía comenzar peor el partido para los de Javi Sánchez, aunque un minuto después Dieguito dejaba todo como estaba con un disparo desde la frontal tras un mal despeje de Juanra; el balón rozaba en la bota del propio Juanra y despistaba a un descolocado portero Lejárraga. Tres minutos y dos goles. La tarde prometía.

La presencia del malí Samu Diarra entre los tres palos fue la principal novedad que presentaba el once inicial del Villarrubia. Ricardo y Algisí, con la ayuda de Andriu, ocupaban el centro de la zaga, con Carlos Martínez y Carlos García en los laterales. Toni Seoane y Julio de Dios se encargaban de la zona ancha, con Dieguito y Arribas más abiertos y Nando Copete como hombre más adelantado.

El Villarrubia celebra el triunfo en el vestuario.El Villarrubia celebra el triunfo en el vestuario. - Foto: Alberto Beamud (Asociación EÑE TVI)Tras este frenético inicio de encuentro el ritmo se atemperaba, aunque sin dejar de ser un duelo intenso, de tú a tú, entre dos equipos necesitados de puntos, según las aspiraciones de cada uno. El Villarrubia sabía que la de ayer era una gran oportunidad para darse el primer homenaje en el Nuevo Campo, para salir así de la zona de descenso.

Pudo adelantar a los locales Toni Seoane al cuarto de hora tras un error de bulto del meta Lejárraga, aunque la mano del propio portero madrileño evitaba su remate a portería vacía. El propio capitán disparaba cruzado en la siguiente acción.

Después de algunos intentos con relativo peligro en ambas áreas, llegaba una acción clave para el devenir de los acontecimientos. En el minuto 38 el colegiado expulsaba al visitante Algar por derribar a Copete cuando éste cabalgaba directo hacia la portería del Real Murcia. Aunque los visitantes alegaron carga legal hombro con hombro, el árbitro no lo veía así y mandaba al vestuario a Algar, llorando de rabia. El golpe franco desde la frontal del área lo ejecutaba Dieguito, obligando a actuara a Lejárraga.

Con poco más que contar se llegaba al descanso, con el viento a favor de un Villarrubia que veía muy cerca esa anhelada primera alegría en casa.

REMONTADA. Aunque el Real Murcia salió al campo con decisión en el segundo tiempo, con el paso de los minutos se iba plasmando sobre el césped la superioridad numérica de los locales. Arribas era el primero en probar con un empalme desde la frontal tras una gran jugada por la derecha de Dieguito. Fue el preámbulo del segundo tanto local, cuando en un saque de banda ‘de autor’ de Carlos García, el balón lo prolongaba con la cabeza Carlos Martínez y en el segundo palo De Dios remataba forzado, tocando el balón en un defensa para elevarse y botar sobre el larguero, cayendo hacia dentro para que, muy atento, Andriu cabeceara a placer para hacer el 2-1 y, de ‘regalo’, llevarse una buena patada en la testa de un defensor.

Los gestos de dolor de Andriu se mezclaron con la alegría de sus compañeros y de una grada que, esta vez sí, veía al alcance de la mano celebrar la primera victoria en Segunda B en el Nuevo Campo. No se podía escapar.

Buscó el empate el Real Murcia, poniendo toda la carne en el asador con la salida al campo de Peque y Melgar, pero el Villarrubia se notaba muy cómodo, aprovechando con velocidad los espacios que cedían los pimentoneros. En el minuto 81 Andriu estuvo a punto de sentenciar el choque con su segundo gol, pero su disparo se marchaba rozando el palo izquierdo de Lejárraga. No hizo falta el 3-1. El crono fue descontando minutos y segundos hasta que esa primera victoria en casa se convertía en realidad.

Ahora toca seguir mirando al frente. El próximo domingo, visita matutina (12 horas) al feudo del Yeclano.

lano.