Una 'segunda' vuelta' con todo en el aire

Leticia Ortiz (SPC)
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La triple cita que vive España -europeas, autonómicas y municipales- llega marcada por los resultados de las generales celebradas hace un mes, que definirán también los posibles pactos postelectorales

Una ‘segunda’ vuelta’ con todo en el aire - Foto: Juan Carlos Hidalgo

Todo preparado para la triple cita con las urnas. Apenas un mes después de las generales, los españoles regresan a los colegios electorales para elegir a sus representantes europeos, autonómicos (en 12 regiones) y municipales. Precisamente, la cercanía con los comicios para el Congreso y el Senado, celebrados el pasado 28 de mayo, hacen de esta nueva fiesta de la democracia una especie de segunda vuelta, en la que los partidos tendrán muy presentes los anteriores resultados. Así, el PSOE, con el viento a favor, quiere revalidar su victoria del 28-A para teñir el mapa territorial de rojo, venciendo incluso en territorios que históricamente han pertenecido a la derecha, como la Comunidad de Madrid o Castilla y León; el PP, por su parte, espera frenar su debacle y recuperar la moral en unas generales que le llevaron a su peor resultado histórico; Ciudadanos aspira a colocarse como segunda fuerza, con un sorpasso a los populares que le permita ser llave de Gobierno en comunidades y ayuntamientos; Podemos necesita hacerse fuerte de cara a la negociación de un posible Gobierno de coalición con los socialistas; y el recién llegado al panorama parlamentario, Vox, busca consolidarse como una alternativa útil en la derecha para ser clave en los Parlamentos regionales y en los Consistorios.

En 2015, el antecedente a las elecciones autonómicas y municipales, los socialistas solo fueron el partido más votado en Asturias y Extremadura, aunque los pactos con Podemos y otras fuerzas de izquierdas les permitió gobernar en otras tres comunidades: Castilla-La Mancha, Aragón y Baleares. El gran triunfador de aquella cita fue el PP, que se impuso en ocho comunidades más Navarra (concurría en alianza con UPN) pero, pese a ser la primera fuerza, únicamente consiguió la Presidencia de cuatro: Castilla y León, Madrid, La Rioja y Murcia. 

La formación naranja, que en 2015 obtuvo sus mejores puestos en Castilla y León, Extremadura, Madrid y Murcia, donde fue la cuarta fuerza, confía estas elecciones en arañar votos por la derecha y conseguir llegar al poder en alguna región. Este podría ser el caso de la Comunidad de Madrid donde, si se repiten los resultados de las generales, Cs fue la segunda fuerza al obtener 86.000 papeletas más que el PP tras un PSOE ganador con un millón de sufragios. De repetirse el sentido del voto, la suma de las derechas (incluyendo los 520.000 votos de Vox) darían para alcanzar la Presidencia, aunque los naranjas estarían en disposición de exigir que fuese su candidato, Ignacio Aguado, el que se quedase con el cargo. 

En Aragón ocurre algo similar pues el pasado 28 de abril, el partido de Albert Rivera superó por 12.000 respaldos a los populares, convirtiéndose en la segunda fuerza más apoyada tras el PSOE. Sin embargo, una alianza como la que gobierna en Andalucía arrebataría el poder al socialista Javier Lambán, con el naranja Daniel Pérez como máximo mandatario.