Varios días han estado negociando la Fiscalía y la defensa de J.M.G. para llegar a un acuerdo por una tentativa de homicidio ocurrida hace dos años en el parque de la plaza de toros, al que siguieron daños en la luna de dos vehículos policiales en los traslados del acusado, que llegó a herir a un agente, al pillarle un dedo con una puerta, tras dar una patada.

El ya condenado ha aceptado cuatro años de prisión, de los ocho que inicialmente solicitaba la Fiscalía, que ha reducido la pena al considerar que existen dos atenuantes para esta rebaja. En este sentido, se ha tenido en cuenta la atenuante de reparación del daño, ya que sus familiares se han hecho cargo de la responsabilidad civil y, por otra parte, la adicción del acusado a las sustancias estupefacientes.

El fiscal Luis Huete recordó que al acusado a «las pocas horas de la detención se le había diagnosticado en el hospital un síndrome de abstinencia». Con estas penas, el intento de homicidio se situaba «entre dos años y medio y cinco» por lo que los cuatro con los que se ha conformado «parece una pena justa y proporcionada a los hechos».

El abogado defensor del acusado, Miguel López, explicó, por su parte, que los hechos se enmarcan en un «forcejeo» que mantuvieron su cliente y el agredido, que sufrió dos puñaladas en el costado, en un momento en que su cliente «tenía limitada su capacidad volitiva» debido a su adicción, mientras que el delito de resistencia «se ha quedado en una pena de multa». Para el abogado se trata de un acuerdo «bastante satisfactorio», apuntó.

Los hechos enjuiciados este martes ocurrieron el pasado 17 de junio de 2017, en el parque situado en las inmediaciones de la plaza de toros de Ciudad Real. El acusado se acercó a la víctima esgrimiendo un cuchillo de cocina con hoja de sierra de aproximadamente 11,5 centímetros de longitud y, tras un forcejeo, lo apuñaló dos veces, una en la axila y otra en el pecho.

El agresor fue detenido el mismo día y durante su arresto causó daños en el vehículo policial al dar una patada a la puerta trasera. El 19 de junio, en un traslado al hospital, fue cuando hirió al agente y dio otra patada a la ventanilla del coche policial.

El acusado lleva en prisión provisional comunicada y sin fianza desde hace casi dos años, desde el 19 de junio de 2017.