El Gobierno de Castilla-La Mancha trasladará a las Cortes «inmediatamente» para su aprobación la propuesta de elevar el límite de gasto no financiero de la comunidad un 14,2 por ciento, lo que dejaría el conocido como ‘techo de gasto’ en los 7.562 millones de euros para el próximo ejercicio 2021.

Así lo anunció el consejero de Hacienda, Juan Alfonso Ruiz Molina tras informar al Consejo de Gobierno, de manera que se da así inicio al trámite para poder elaborar los presupuestos regionales, y que contarán con 942 millones de euros más que el año en curso.

Unos datos que «no tienen precedentes» en la historia de la comunidad, y que se explican por la «excepcionalidad» a la que nos vemos sometidos por la crisis del coronavirus, que ha elevado la incertidumbre a niveles insospechados.

Precisamente por eso Ruiz Molina realizó una previsión de la evolución de la economía para 2020 y 2021 de «máxima prudencia», de manera que los cálculos se ajusten lo más posible a la realidad de nuestra comunidad autónoma.

Caída del PIB

En este sentido, el Ejecutivo prevé una caída del PIB regional en torno al 8,3 por ciento para este año por la incidencia del virus. Una caída que, sin embargo, es menor que la que se prevé para el conjunto del país, y que está cifrada en el 11,2 por ciento.

Ya para el año 2021, la previsión es que se pueda registrar un crecimiento del PIB «en términos reales» del 4,2 por ciento, mientras que para el conjunto del país la recuperación se estima en el 7,2. «Si la caída es menor, la recuperación también es más suave» justificó, y explicando este comportamiento por la particular estructura económica de la región, con un sector turístico y de servicios con menor peso que en la media nacional, y a su vez un sector productivo agrícola y manufacturero mayor, que es el que ha resistido mejor a la crisis derivada de la pandemia. «Hablamos de la famosa ‘V’ asimétrica» expresó.

El consejero espera poder cumplir los plazos y tener unos presupuestos regionales ya en vigor a partir del 1 de enero de 2021, o como mucho unos días después con las cuentas prorrogadas.

Ruiz Molina espera con estas previsiones poder tener unos ingresos cercanos a los 6.176 millones de euros –5.303 procedentes de las llamadas entregas a cuenta del Estado que se derivan de impuestos como el de la renta de la personas físicas, el IVA o impuestos especiales, y los 873 restantes de ingresos tributarios gestionados por la comunidad autónoma–, lo que supone un 15 por ciento menos que en el año anterior porque «la realidad es muy diferente» a consecuencia del Covid.

También han permitido estas cuentas la suspensión de las reglas fiscales por parte del Ministerio que dirige María Jesús Montero, y que fijan como tasa de referencia el 2,2 por ciento del PIB para endeudarse, la mitad con cargo al Estado, de manera que es un 1,1 que equivale a 445 millones de margen.

El Gobierno no se plantea aumentar la presión fiscal a los ciudadanos, por lo que no habrá subida de impuestos . «Se mantiene la misma presión fiscal que llevamos desde hace varios ejercicios» confirmó el consejero sobre unas cuentas que «no tienen ni trampa ni cartón». Es por eso que, aún siendo consciente de que la mayoría absoluta del PSOEen la Cortes aprobará este techo de gasto, confió en que tanto PP como Ciudadanos puedan darle el visto bueno, y que se les pueda sacar «el mayor rendimiento posible».