Que Max Verstappen es uno de los mayores talentos que hay en la Fórmula Uno no hay duda. Que algún día gobernará el ‘Gran Circo’ es la sospecha de muchos. Pero de momento, el joven de 21 años convive entre el cielo y el infierno.
El holandés de Red Bull no deja indiferente nunca a nadie. Es uno de los pilotos que más arriesgan, a los que no les impone respeto tener delante a un múltiple campeón del mundo. Si hay que intentar un adelantamiento en una curva en la que solo existe hueco para un coche, ahí irá Verstappen.
Es el más joven de la Historia en celebrar una victoria -tenía 18 años y 228 días cuando ganó el Gran Premio de España en 2010- estaba realizando una carrera inolvidable el domingo en el circuito de Interlagos. Tras haber partido desde la quinta posición, adelantó a los dos Ferrari y a los dos Mercedes para colocarse líder. Y cuando ya únicamente tenía que aguantar la posición para celebrar su segundo triunfo consecutivo, el francés Sebastian Ocon se cruzó en su camino y le arruinó la carrera.