Durante los meses de julio y agosto han muerto en las carreteras de la provincia de Ciudad Real cuatro personas, tres menos con respecto al mismo periodo del año pasado, que fue el peor verano desde 2010, con siete víctimas mortales en la red provincial. En lo que va de año han muerto cinco personas menos en las carreteras que en 2016, han indicado a La Tribuna fuentes solventes.