El Partido Socialista es, al mismo tiempo, el beneficiado y el gran perjudicado por el sistema que establece las subvenciones electorales a partir de los resultados en las pasadas elecciones generales, pero si el espejo se pone en las últimas generales, las de junio de 2016, el gran perjudicado por sus resultados electorales es el Partido Popular en la provincia, que de no ser por el límite que establece la ley hubiera perdido, por su pérdida de representación y de votos, alrededor de 175.000 euros, una caída en la caja de las subvenciones que se ha quedado finalmente en unos 65.000 euros.

Aplicando los supuestos de la ley en las pasadas elecciones generales, junio de 2016, sólo fueron cuatro las formaciones políticas que ingresaron subvenciones en la provincia, y Cs y Unidas Podemos lo hicieron en concepto de envío de propaganda por correo (72.099,36 euros cada uno). En esas elecciones, el PP sacó tres diputados y tres senadores, y el PSOE dos diputados y un senador, y aunque en diferente medida, ambos se vieron afectados por el tope máximo subvencionable. Así, percibieron 190.073,81 euros por sus resultados y la representación que obtuvieron, más los más de 72 euros por el correo. Es decir, que tanto PP como PSOE ingresaron 262.173,17 euros. O lo que es lo mismo, 6.134 euros más que este año en el caso del PSOE y 64.646,25 euros más en el caso del Partido Popular. Sin el límite impuesto por ley, la cuantía a percibir por el PP hubiera aumentado hasta los 373.000 euros, por lo que los malos resultados cosechados en estas elecciones hubieran tenido un ‘coste’ para el partido de más de 175.000 euros.

Sólo por cuantificar en cierta medida lo que puede suponer la pérdida de representatividad para el PP, entre el Congreso y el Senado, por la caída de escaños, la subvención, sin contar los límites, ha caído en 3,06 millones de euros.