Una noticia positiva en medio de la emergencia sanitaria global. Castilla-La Mancha empezará a distribuir hoy casi 6.000 test rápidos de detección del coronavirus de los 60.000 adquiridos. Son un total de 5.850 y pueden detectar en apenas 15 minutos si una persona está infectada. Especialistas del Servicio de Salud regional han comprobado que son fiables y cuentan con la certificación europea y la aprobación de la Agencia Española del Medicamento. Así lo trasladaron ayer por la tarde el presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, y el consejero de Sanidad, Jesús Fernández Sanz, en una comparecencia pública.
Las pruebas se realizarán a los colectivos prioritarios: sanitarios, residentes y trabajadores de residencias de ancianos sospechosos, pacientes ingresados en hospitales pendientes de decisión de aislamiento, indicó el presidente. Los test se enviarán mañana a las diferentes gerencias del Servicio de Salud de Castilla-La Mancha con el fin de que puedan iniciar su realización cuanto antes en función a un protocolo diseñado con los colectivos prioritarios antes indicados. «Los profesionales sanitarios nos hacen mucha falta y también conocer su estado de salud», manifestó el consejero.
Se ha remitido alguna unidad al Instituto de Salud Carlos III para que el Ministerio de Sanidad conozca el tipo de test adquiridos y contribuir así, dijo Fernández Sanz, «no solo a mejorar el diagnóstico aquí sino que esta información sirva para el resto (de comunidades autónomas)».
El consejero informó de que también han llegado los primeros ochos respiradores adquiridos y se esperan más en las próximas horas. Se suman a los 30 aparatos de asistencia respiratoria que hay libres en la región, según los datos ofrecidos ayer por el Gobierno. «Hacen falta más», reconoció, por lo que el presidente autonómico tiene abiertas «varias vías de negociación» para su compra.
El ministro de Sanidad, Salvador Illa, llamó al consejero para informarle de que el Gobierno iba a ayudar a desbloquear una de las operaciones con material procedente de Turquía, según indicó Page. «Estamos negociando cada minuto el aprovisionamiento de material», confesó.
Desde el lunes hasta ayer hay 87 respiradores más en la red hospitalaria de Castilla-La Mancha.
Sobre la capacidad asistencial, el consejero cifró en 800 las camas libres (a las 11,30 horas, especificó) con una distribución «irregular» en las distintas gerencias hospitalarias.
En la región hay un total de 4.512 casos positivos de coronavirus, 2.977 hospitalizados, 289 personas con respirador y la cifra de fallecidos asciende ya a 448 personas.
El número de intubados se eleva a 289 y los pacientes extubados en Castilla-La Mancha ya son 26. Hace 72 horas solo era una persona.
Se han hecho un total de 13.000 pruebas de diagnóstico en Castilla-La Mancha que aumentarán en los próximos días con los test rápidos, lo que permitirá, afirmó el consejero, «diagnosticar pronto y tratar pronto» a los contagiados.
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El número de intubados se eleva a 289 y los pacientes extubados en Castilla-La Mancha ya son 26. Hace 72 horas solo era una persona.