El Formac Villarrubia dirá adiós a su hinchada en el Nuevo Campo con un trascendental partido en plena lucha por el descenso. Será este domingo, en horario ‘Champions’ (20.45 horas) y frente a Las Rozas, un rival curtido que se metió en problemas en la primera fase y que quiere aferrarse a la permanencia.
Será, por tanto, una final más, la última final en el Nuevo Campo, con la incertidumbre en el aire de si el equipo blanquiazul volverá a jugar en casa en Segunda RFEF o en Tercera. Aquí es entonces cuando aparecen los recuerdos, la ilusión de un pueblo. Ese lema grabado a fuego que supuso un ascenso histórico para un pueblo de algo menos de 10.000 habitantes y para un club que cabalgó y que quiere seguir cabalgando entre gigantes. Por eso, el apoyo de la grada se presenta como clave para una cita donde solo vale ganar. Ganar y esperar. Y la próxima semana, más de lo mismo. Ganar. Ganar y esperar. Porque jugar con doce jugadores, todo es más fácil.
Recibe este domingo el Villarrrubia a Las Rozas después de un cruce de horarios y de intereses (20:45 horas, dirigido por el aragonés Latorre Gracia). Y es que a falta de cordura y sentido común unificando horarios, cada club mira por lo suyo. Con un ojo puesto en Melilla y otro en el Paquito Giménez, los de Javi Sánchez dependen de terceros para conseguir la salvación.
Para el encuentro, el técnico blanquiazul podrá contar con todos sus hombres, aunque Dani Homet se presenta como seria duda tras retirarse con un esguince de tobillo en el descanso ante el Atlético de Madrid B. Por el contrario, Carlos García será la gran novedad una vez cumplido un partido por acumulación de amonestaciones.
Enfrente estará un equipo como Las Rozas que viene de empatar ante el Socuéllamos y que marcha tercero en este grupo de permanencia con 27 puntos, uno por encima del Formac Villarrubia, por lo que la victoria es fundamental para adelantarles en la clasificación.
“Es el último partido en casa y se tiene que notar. Necesitamos el apoyo de la afición más que nunca y ellos tienen que marcar el primer gol. Mientras tengamos vida, tenemos que pelear hasta el final y el equipo está preparado para ello. Llevamos cuatro partidos sin perder con tres empates y una victoria, las sensaciones son cada vez mejores y es hora de que la suerte nos vaya sonriendo un poquito más. Creo que hemos hecho méritos para estar en una posición más cómoda, pero esto es fútbol y al final pone a cada uno en su sitio”, explicaba Javi Sánchez en la previa del encuentro.
En este sentido, finalizaba diciendo que “espero un partido difícil, a cara de perro, con dos rivales que nos jugamos mucho y donde el que gane saldrá muy reforzado para la última jornada y el que pierda, directamente estará descendido. Yo, mi cuerpo técnico y mi equipo seguimos confiando hasta el final”.