El próximo 4 de octubre, un total de 200 viticultores de la región recibirán un nuevo abono de las ayudas de reestructuración de viñedo, en esta ocasión por importe de tres millones de euros, con lo que el montante total en lo que llevamos de campaña ascenderá a 26 millones. Si la semana que viene el resto de profesionales que están pendientes de la reestructuración solicitan los anticipos o si ya los tienen y presentan el aval, «podrán cobrar estas ayudas antes del 15 de octubre».

Así lo destacó este jueves el consejero de Agricultura, Agua y Desarrollo Rural, Francisco Martínez Arroyo, durante su visita a la cooperativa Vinícola de Tomelloso, en la que estuvo acompañado por su presidente, Fernando Villena, miembros del Consejo Rector, así como la alcaldesa de la localidad, Inmaculada Jiménez, y la delegada de la Junta en la provincia, Carmen Olmedo.

El mensaje lanzado por Martínez Arroyo es «muy importante» porque Castilla-La Mancha, de esta manera, utilizará todos los recursos públicos que ha puesto a disposición para los viticultores en esta campaña. Recordó, en este punto, que la región es la que más recursos públicos posee para este fin y es necesario emplearlos para enfocar el sector a la calidad y a los deseos de los consumidores, apostando por aquellas variedades que tienen más salidas en los mercados.

Se trata de cumplir con lo que denominó «la triada de la calidad», un extremo que caracteriza a esta bodega, ya que apuesta por la calidad, el embotellado, que genera mayor rentabilidad, y por la Denominación de Origen La Mancha.