El informe del Tribunal Superior de Justicia de marzo da una cifra de fallecimientos en la región con sospecha de coronavirus que supera los registros oficiales en más de un millar de muertes. La portavoz del Gobierno regional, Blanca Fernández, aclaró esta mañana que en la Junta están contabilizando los fallecimientos con coronavirus tal y como les dice el Ministerio de Sanidad que tienen que hacerlo. «Todas las comunidades autónomas seguimos a rajatabla las instrucciones marcadas por el Ministerio», señaló, «entendemos que no puede ser de otra manera».

Fernández expuso que el Ministerio les da esas instrucciones siguiendo criterios científicos y epidemiológicos, pero que si se cambiaran la Junta sería la primera en aplicar esa modificación. «Si mañana el Ministerio por razones objetivas, por recomendaciones de la OMS, decidiese cambiar el protocolo, Castilla-La Mancha lo cambiaría porque la autoridad sanitaria es única, el mando es único y está en el Gobierno de España», insistió.

Aunque ver la diferencia de cifras ha provocado cierto revuelo, Fernández quiso dejar claro que en Castilla-La Mancha «trabajamos con la mayor transparencia, con la mayor honradez». Aprovechó además para recalcar que es una de las comunidades autónomas «que más tests está haciendo dentro de la población porque hemos tenido la suerte de contar con tests rápidos antes que otras comunidades autónomas». A comienzos de esta semana ya se habían hecho 4.000 y la Junta tiene 97.000 para hacer como mínimo, entre los 40.000 que ha comprado la Administación regional y otros 57.000 que le va a dar el Ministerio de Sanidad.