"Ha estado en prisión y no nos gustaba para mi hermana"

Pilar Muñoz
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Uno de los hermanos de la joven cuyo cadáver desmembrado ha sido hallado en Santander relata a La Tribuna que su hermana y presunto homicida mantenía una relación desde hacia siete meses y que habían ido a la ciudad cántabra a buscar trabajo

"Ha estado en prisión y no nos gustaba para mi hermana"

No les gustaba el novio de su hermana, pero jamás pudieron imaginar que la relación acabaría con la muerte violenta de ella, con su cadáver desmembrado y arrojado en siete bolsas de basura en una zona de matorrales de Santander próxima a las vías del tren. 

Nancy tenía 29 años y desde hacía siete meses mantenía una relación sentimental con Carlos Andrés, un colombiano de 28 años, que está en prisión acusado de acabar con su vida. No es la primera vez que acaba en la cárcel. "Ha estado en prisión antes y no nos gustaba para mí hermana, pero como todo marchaba bien, estaba contenta, pues no dijimos más", relata a La Tribuna uno de los hermanos de la joven cuyo cadáver desmembrado fue hallado el jueves en Santander.

Dice que en agosto fueron a la capital cántabra "a buscar trabajo". Nancy trabajaba de asistenta en una casa, "hacía horas" y "él no tenía trabajo". Según cuenta el hermano de la víctima, Carlos Andrés "iba con muletas" porque había tenido un accidente, "pero podía caminar", remarca para, a renglón seguido, asegurar que "estamos destrozados y nuestros padres no saben nada, hemos llamado a un tío para que les comuniquen" lo ocurrido.

"Ha estado en prisión y no nos gustaba para mi hermana"El hermano de Nancy asegura que el corazón les decía que a su hermana le había pasado algo malo sin sospechar "una cosa tan horrible". "No le encuentro explicación", no la tiene. "Estamos pendientes del resultado de las pruebas de ADN. Fuimos a la Comisaría de Ciudad Real para que nos tomaran muestras, que mandaron a Santander", explica en relación a las pruebas de ADN para confirmar que los restos hallados en la capital de Cantabria corresponden a Nancy. "El corazón nos dice que es ella", reiteran tras asegurar que están viviendo un infierno y sólo quieren poder traer el cuerpo de su hermana a Ciudad Real y después repatriarlo a Guatemala, donde están sus padres.