Los ingresos que reporta la zona azul a las arcas municipales han experimentado una tendencia al alza a lo largo de toda la legislatura y han cerrado el ejercicio 2018 con un récord de 266.806,96 euros. La cifra supone un incremento de más de 18.000 euros (+7,36%) con respecto a los 248.494 euros que recaudó el Ayuntamiento por esta vía en 2017, mientras que en 2016 se situaron en 237.729,76 euros y en 2015 en los 229.109,17 euros. En el conjunto de la legislatura, la recaudación roza el millón de euros, en concreto, 982.138 euros.
El concejal de Movilidad, David Serrano, lo encuadró en el contexto de «un incremento generalizado de la movilidad: ha aumentado la recaudación, el transporte público, las bicicletas, los patinetes», del mismo modo que se refirió a la «recuperación» de la economía que se ha traducido también en un incremento del turismo en la ciudad, dijo el edil para matizar a renglón seguido que desde el equipo de Gobierno han trabajado sin embargo para «que la única opción no sea la zona azul» y de ahí que subrayara la apuesta que se ha hecho por fomentar los modos de transporte alternativo, principalmente el autobús urbano. Del mismo modo, se refirió a la puesta en marcha de aparcamientos disuasorios que eviten a los conductores desplazarse hasta el centro con el coche, en concreto el estacionamiento de la calle Severo Ochoa, el de la Puerta de Toledo y el ubicado en las inmediaciones del teatro-auditorio, que cuenta con unas 70 plazas y con la que Movilidad trató de ‘suplir’ la pérdida de las 250 plazas que ofrecía de modo gratuito la explanada del Quijote Azteca, que dejó de tener uso como aparcamiento desde julio de 2017. Sobre sus posibles efectos en la zona azul, Serrano comentó que lo que han percibido los vecinos de Larache es sin embargo un aumento del estacionamiento en las calles situadas en esta zona. Con respecto a la creación de un nuevo estacionamiento en la calle Lirio, comentó que ya se ha realizado la cesión del uso por parte de la Junta al Ayuntamiento y que está pendiente de la ejecución de las obras para convertirlo en una realidad. De las llamadas medidas de rediseño de la zona azul poco se ha ejecutado en este mandato y sólo se han traducido en la implantación de la opción ‘desaparcar’ en las plataformas móviles del pago de la ORA y en la puesta en marcha de la tarjeta profesional, que se desea ampliar a más colectivos para que dotarla de relevancia.
Está aún pendiente la medida para dejar sin efecto la zona azul en las tardes de agosto y de Semana Santa o la ampliación del periodo de anulación de las multas de una a dos horas. Esas medidas se contemplaban en una modificación de la ordenanza de estacionamiento regulado que arrancó al mismo tiempo que la del Taxi, la cual ya se ha aprobado, mientras que la relativa a la ORA está «dentro de la vorágine burocrática del Ayuntamiento», ya que como contempla «un contenido económico, necesita de la fiscalización de Intervención». «Va a suponer una bajada de la recaudación», recordó el edil en relación al compromiso adquirido por el equipo de Gobierno de reducir el afán recaudador de la zona azul y potenciar su carácter de rotación.
En cuanto al compromiso adquirido con Ganemos en el acuerdo de investidura, aseguró que la oposición no contaba «ni por asomo» con la información con la que cuenta ahora y que tras examinar los contratos, vieron que, al estar comprometidos a un periodo de 20 años, suponían «una indemnización de 12 millones de euros», por lo que «en cinco legislaturas, cualquier gobierno no se lo va a poder plantear». «Es inviable gastarnos 12 millones en rescindir un contrato a 20 años cada uno», por lo que insistió en transportes alternativos y peatonalizaciones que, cuando se ejecuten, reducirán las plazas de zona azul.