600.000 euros para la reforma de la plaza del Gran Teatro

A. Criado
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La reforma integral de la plaza del Gran Teatro de Manzanares arrancará con 600.000 euros para acerados y las redes de abastecimiento. La primera fase, que se iniciará en los próximos meses, se centrará en la zona central de la calle Toledo

600.000 euros para la reforma de la plaza del Gran Teatro

El presupuesto del Ayuntamiento de Manzanares, que finalmente ascenderá a 18,15 millones de euros, reserva alrededor de dos millones para inversiones, aunque esta cuantía podría aumentar a lo largo del ejercicio, siempre en función de la evolución de la pandemia y las necesidades de cada momento. Parafraseando al alcalde de la vecina localidad de Valdepeñas, las cuentas del 2021 «salen a la aventura».

Uno de los proyectos más ambiciosos que pretende acometer el equipo de Gobierno de Julián Nieva es la reforma integral de la plaza del Gran Teatro, uno de los centros neurálgicos del municipio. Una actuación que cuenta con un presupuesto aproximado de 1,2 millones de euros y que se ejecutará en dos fases. La primera, en 2020 (es probable que este año dé comienzo también la segunda), contará con una partida de 600.000 euros, destinada fundamentalmente a la renovación de redes de agua y sustitución de árboles y acerado. Los trabajos comenzarán en el tramo central de calle Toledo, dejando accesos habilitados a los juzgados, el auditorio y la iglesia de Altagracia.

Según avanzó a La Tribuna el alcalde de la ciudad, Julián Nieva, el proyecto será similar al acometido años atrás en la plaza de la Constitución, dejando todo el entorno del Gran Teatro semipeatonalizado, con una plataforma única de granito para las aceras y de taco de granito para la calzada. Afectará a toda la calle Toledo, desde la rotonda del Paseo de la Estación y el cruce con la Carretera de La Solana hasta la rotonda que da acceso a las calles Morago y Reyes Católicos. También se integrará en el proyecto parte de las calles Libertad y Padres Capuchinos.

La regulación de la movilidad está aún por decidir, pero la idea es que esta zona semipeatonalizada sólo permita el acceso de vehículos de lunes a viernes por la mañana, permaneciendo cerrada al tráfico por las tardes, los fines de semana y los festivos. El proyecto conllevará la pérdida de varias plazas de estacionamiento en zona azul, que el Ayuntamiento tendrá que compensar a las empresa adjudicataria del servicio. «Queremos recuperar una plaza que se ha modificado a base de retales en los últimos 30 años», sentenció Nieva.