La provincia de Ciudad Real batió este jueves el récord de contagios en 24 horas, con 1.969 casos, superando los datos del pasado 5 de enero cuando fueron 1.968. Se trata de una muestra de que la curva de la sexta ola solo se aplana, no desciende, pese a que son varios los indicadores que apuntan a que el pico se podría haber alcanzado en los días previos a Reyes. Se trata de un récord logrado en una jornada sin muertes.

El dato viene acompañado de un incremento de la hospitalización en planta. En concreto 15 personas más han ingresado en los centros sanitarios de la provincia con aumento en los seis hospitales. Ciudad Real registra 53 pacientes (3 más); La Mancha Centro, 38 (5); Valdepeñas, 14 (4); Puertollano 10, uno más, el mismo aumento que se ha producido en Tomelloso, que tiene nueve pacientes, y Manzanares, donde eran siete este jueves. La mejor cifra es que una persona ha salido de la UCI, por lo que son nueve los ingresados en las unidades de intensivos de Ciudad Real.

Hay que tener en cuenta que, pese a estos datos de récord, tras superarse el lunes los 2.871 de incidencia acumulada a 14 días, la más alta registrada para la provincia, se empieza a experimentar una reducción paulatina de las cifras que podrían suponer el inicio del fin de la sexta ola. De momento, la incidencia lleva dos días consecutivos cayendo y si con datos hasta el martes se redujo a 2.778,56, este miércoles se situó en 2.747,49, según el Instituto de Salud Carlos III. Falta por saber lo que ocurrirá cuando los datos de este jueves se incluyan en el sistema del organismo nacional.

Por otra parte, continúa la presión en los centros residenciales de la provincia y son 20, uno más que el miércoles, los espacios en los que al menos hay un caso positivo por COVID. Un total de 140 centros sociosanitarios de Castilla-La Mancha tienen casos confirmados.