La hija menor de edad avisó ayer a los servicios de emergencias de que su padre, identificado como P. M. F. y de nacionalidad portuguesa, había recibido un disparo en el pecho con su propia arma, con la que iba a cazar palomas en una finca localizado en el término municipal de San Martín de Montalbán, provincia de Toledo. La víctima murió en el puesto que le correspondía en esta jornada cinegética, la primera de la media veda en Castilla-La Mancha, por lo que la temporada ha comenzado con un hecho luctuoso en los Montes de Toledo.

El fallecido, aficionado a la caza desde pequeño, trabajaba de guarda en una finca en Los Montes de Toledo y se había desplazado a la finca del término de San Martín de Montalbán para practicar el tiro a la paloma. Hacia las 9,30 horas, se desencadenó el suceso con su propia arma. La hija, de unos 13 años, acompañaba a la víctima en el puesto y fue la que avisó del accidente a los servicios de emergencias.

El herido fue atendido en el mismo lugar del suceso, pero los medios desplazados no pudieron hacer nada finalmente por salvar su vida. Hasta el lugar, acudieron un médico de urgencias, una ambulancia de urgencias, un helicóptero sanitario y los agentes de la Guardia Civil.

La Policía Judicial de la Guardia Civil ha abierto una investigación para tratar de aclarar las causas del fallecimiento, como se hace habitualmente en este tipo de accidentes. El suceso ocurrió en el término municipal de San Martín de Montalbán, pero por distancia la finca se encuentra más cercana al núcleo urbano de Navahermosa, por lo que en un principio se informó de que el siniestro había ocurrido en este municipio de los Montes de Toledo.

Castilla-La Mancha iniciaba precisamente ayer el periodo hábil para la temporada de media veda, que se va a prolongar hasta el mes de septiembre. En este sentido, la caza de la paloma torcaz y la tórtola común permanecerá abierta hasta el próximo 22 de septiembre. Asimismo, la media veda incluye otras especies como la codorniz, el zorro o la urraca.

La Federación de Caza lamenta el fallecimiento

El presidente de la Federación de Caza de Castilla-La Mancha, Agustín Rabadán, lamentó ayer el accidente de caza en el que falleció el hombre de 45 años.

El presidente de los cazadores castellanomanchegos indicó en declaraciones a EFE que no tenían conocimiento de las condiciones en las que se había producido este accidente, que ha coincidido con el inicio de la media veda en Castilla-La Mancha. Sobre las causas que han podido provocar este tipo de sucesos, ha dicho que suelen estar relacionadas con acciones accidentales o excesos de confianza.