La segunda sesión de las tertulias que organiza el Ateneo Taurino Manchego en el Hotel NH de Ciudad Real fue un clamor contra los toros de Daniel Ruiz, contra el presidente de la plaza, Francisco Delgado, y por ende contra la empresa Toros Ciudad Real SL por confiar por segundo año consecutivo en esta ganadería después de que el año pasado el mismo ya fuera objeto de numerosas críticas.

El encuentro de los aficionados más exigentes tuvo un poquito de tregua en los momentos iniciales, minutos de cortesía para departir con dos de los protagonistas de la corrida de rejones de la tarde, la portuguesa Ana Rita y Leonardo Hernández.

Pero una vez que los caballistas se retiraron de la sala, la mesa quedó dispuesta para el presidente del Ateneo Taurino, Antonio Espadas, a quien acompañaba el director provincial de Hacienda y Administración Pública, Francisco Pérez; el propietario de la ganadería Víctor y Marín, Felipe Lasanta; el ex presidente de la plaza de Ciudad Real, Eduardo Rodríguez; el presidente de la Asociación Taurina de Fernán Caballero, Enrique Estrada; y los aficionados locales Juan Luis Huertas y Diego Ortega.

Tanto en las intervenciones de buena parte de los que se encontraban en la mesa, como en mayor medida, las que se realizaron desde las filas del público, se cuestionó la falta del criterio de la presidencia al no rechazar unos toros que a juicio de muchos, eran flojos, estaban por debajo del peso requerido y estaban faltos de trapío.

En este sentido, Huertas llegó a decir que si desde la propia fiesta «no cuidamos la dignidad de la fiesta, no garantizamos la emoción de la corrida, estamos dando la razón a los antitaurinos».

Pero desde el público también hubo quien porfió en defensa de la integridad del actual presidente de la plaza; mientras que Francisco Pérez, en un papel más institucional, reclamaba respeto en todas direcciones, también de y hacia los antitaurinos.