El largamente reivindicado Juzgado de Primera Instancia e Instrucción de Ciudad Real va a llegar amortizado, pero es «bienvenido» porque supone un incremento de planta judicial efectiva en el ámbito civil. Así lo asegura en declaraciones a La Tribuna el juez Antonio Mejía, que conoce bien la situación en los juzgados de Ciudad Real donde ejerce la carrera judicial iniciada hace treinta años.
El Ministerio de Justicia acaba de publicar la creación del octavo Juzgado de Primera Instancia e Instrucción y la transformación del número 4 en Mercantil. De entrada, parece que Ciudad Real se queda prácticamente como estaba, sin que se resuelva la situación de estos juzgados mixtos. Son siete, pero tres tienen otras competencias y, por tanto, están exentos del reparto de asuntos de ámbito civil. De ahí que sólo el 1, 2, 6 y 7 asuman estos procedimientos.
El juez Mejía explica que en las juntas de jueces de 2 de octubre de 2020 y 5 de marzo de 2021 se les pidió un informe sobre la especialización de Mercantil como juzgado exclusivo. La junta de jueces emitió un informe favorable al considerar que era necesario, pero siempre y cuando estuviera vinculado a la creación del Juzgado número 8.
Según el magistrado, que el mixto número 4 pase a ser el 1 de Mercantil no va a suponer más carga de trabajo para los demás juzgados de Primera Instancia e Instrucción, ya que tendrán un juzgado más. «El 4 no lleva nada de civil y la creación del octavo juzgado significa que se incrementa la planta en el ámbito civil en los órganos judiciales de Primera Instancia», subraya el juez Mejía.
El Juzgado número 4 «sólo conoce de materia mercantil», es decir tiene la competencia en este orden y su especialización es «necesaria» por la especialidad de la materia, su complejidad y los asuntos que ha llevado estos años de atrás. Para el titular del Juzgado de Primera Instancia e Instrucción número 1, en 2004 debería haberse creado el Mercantil de forma exclusiva aunque en ese momento no se registraran los números de ahora. Considera que no se fue previsor y pronto llegó la crisis de Lehman Brothers. Se creó el Juzgado número 7 y Mejía fue destinado en comisión de servicio mientras se proveía la plaza de juez. Se constituyó el 31 de diciembre de 2010 y se hizo sin titular al quedar desierto el concurso ordinario para cubrir la plaza de juez. Fue el magistrado Antonio Mejía, del número 2, el destinado a hacerse cargo del entonces recién creado juzgado durante unos meses mientras se resolvía el asunto de la plaza. Ahora se ha creado el número 8 en papel BOE. «Es habitual que el decreto de creación de un nuevo juzgado salga publicado en el Boletín Oficial del Estado a últimos de año porque a efectos prácticos va en los presupuestos del año siguiente. Se crea ahora con cargo a las cuentas del año que viene», indica el veterano juez, quien añade que suelen entrar en funcionamiento un año después.
Insiste en que el hecho de que el número 4 pase a ser el 1 de Mercantil beneficia a todos por la creación del octavo juzgado mixto.
Menos juzgados que 1988. El Ministerio de Justicia no ha tenido muy en cuenta a Ciudad Real en cuanto a planta judicial y otros medios, pese a ser la tercera provincia de España más grande en extensión con municipios muy poblados y alejados unos de otros.
Sin entrar en el partido judicial de Ciudad Real que atiende a más de una veintena de municipios, hay localidades como Manzanares o Valdepeñas que tienen menos juzgados que en 1988 con la Ley de Planta. Los asuntos que registran se han podido multiplicar por 20 sin aumento de juzgados, remarca el juez Mejía, quien recuerda que «la primera impresora fue de mi propiedad» y cuando llegó el primer ordenador al juzgado, otras administraciones e incluso organismos sociales «ya habían cambiado varias veces los ordenadores».