Fuentes del equipo de producción de la película Padre no hay más que uno 2, que dirige y protagoniza Santiago Segura, avanzaron a La Tribuna que parte de las escenas de esta cinta se rodarán este viernes en Ciudad Real, en las instalaciones de Ciudad Real International Airport (CRIA).

La instalación aeroportuaria estará el viernes cerrada al público en la zona reservada para el rodaje, en la terminal de pasajeros, y los equipos de seguridad tendrán la misión de impedir el paso de los curiosos. El objetivo de que la grabación de las escenas pueda desarrollarse según lo previsto y sin interrupciones, advierten desde los servicios de prensa de la película. Sin embargo, el Aeropuerto mantendrá las operaciones de vuelo previstas para el jueves y viernes.

Los que sí tendrán ocasión de estar en el meollo de la producción serán los figurantes contratados para esta película en Ciudad Real, una convocatoria que se abrió el pasado 5 de enero y en la que se inscribieron 1.500 personas.

Por su parte, la responsable del equipo de producción, la alcarreña María Luisa Gutiérrez, recordó que Santiago Segura ya conoce las instalaciones del aeropuerto manchego, puesto que aquí rodó parte de las escenas finales de Torrente 5.

Gutiérrez, señala que en su condición de castellano-manchega «siempre que puedo, me llevo rodajes a nuestra comunidad», y enumera varias producciones que tuvieron como escenario Yunquera de Henares, Guadalajara, Toledo y Ciudad Real, como es el caso de la anteriormente citada con Santiago Segura.

La productora explica que en Ciudad Real, «los equipos de preparación estarán en torno a tres días, el equipo de rodaje, uno», pero no será estos los únicos días en los que se tomen imágenes en Castilla-La Mancha, así observa: «En la comunidad estaremos casi la mitad de la película».

Gutiérrez justifica la elección de Ciudad Real para rodar las escenas de aeropuerto en lugar de hacerlo en el Aeropuerto de Barajas Adolfo Suárez. «Desde luego, tiene un coste extra en desplazamientos, pero también la tranquilidad y seguridad de ser siempre muy bien recibido. En Madrid la gente está harta de rodajes», puntualiza la realizadora.