Cierra ejercicio dentro del límite de pago a proveedores

Manuela Lillo
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La Administración cumple de este modo con los plazos establecidos y la obligatoriedad de remitir mensualmente estos datos al Ministerio de Hacienda

Cierra ejercicio dentro del límite de pago a proveedores - Foto: Tomás Fernández de Moya

El Ayuntamiento de Ciudad Real cerró el año 2019 con un periodo medio de pago a sus proveedores de ocho días, en concreto, 8,09 días, un plazo prácticamente igual que el registrado un año antes, en diciembre de 2018, cuando se situó en los 8,05 días, según los datos publicados recientemente por el Ayuntamiento de Ciudad Real y remitidos al Ministerio de Hacienda y Función Pública, que es el encargado de vigilar que las entidades locales cumplan con los plazos establecidos por la legislación y que mantengan ‘a raya’ la deuda pública.

El pago a los proveedores registró el plazo más elevado en marzo del año pasado, con 34,61 días, si bien el concejal de Hacienda, Nicolás Clavero, explicó que había que tener en cuenta el cambio de la normativa que se había llevado a cabo, de manera que a partir de ese momento «el plazo del pago de las facturas se calcula desde la fecha de entrada en el registro electrónico hasta la fecha de pago». Anteriormente, sin embargo, había un periodo de 30 días desde el registro de la factura hasta su aprobación y de otros 30 desde su aprobación hasta el abono.

Los datos del mes de diciembre ponen de relieve que el cómputo total en la Administración local es de 7,66 días, si bien se detalla que en la Casa Consistorial el periodo medio fue de los 8,09 días mencionados, mientras que en sus organismos autónomos esas cifras son menores. En el Patronato de Personas con Discapacidad fue de 3,8 días; en el Patronato Municipal de Deportes de 2,66 días y en la Empresa Municipal de Servicios (Emuser) no llegaba a un día (0,53).

De este modo, se pone de manifiesto el cumplimiento del periodo medio de pago a los proveedores, uno de los aspectos en los que más ha incidido el equipo de Gobierno desde el año 2015. Eso, teniendo en cuenta que en ejercicios anteriores el Gobierno del PP se acogió a unas líneas de crédito para sufragar la deuda pendiente que dio lugar a un plan de ajuste, ya anulado en la pasada legislatura.