La Relación de Puestos de Trabajo del centro penitenciario de Herrera de La Mancha establece una plantilla tipo integrada por 237 personas. Sin embargo, en la actualidad en la plantilla hay 54 vacantes por cubrir o, dicho de otro modo, hay más de un 20% de plazas sin ocupar. Según ha podido saber este diario, entre las categorías en las que faltan más funcionarios destacan las de servicio interior (vigilancia de presos): están sin cubrir trece de encargado, ocho de personal de servicio y cuatro de subalterno. Además, hay bastantes vacantes administrativas y están sin ocupar dos de médico. En lo que va de año se han jubilado varios trabajadores de Instituciones Penitenciarias adscritos a Herrera de La Mancha y otros han pasado a segunda actividad. Estos puestos quedan vacantes y como lleva sucediendo desde hace unos años no se cubren. Cinco funcionarios van a pasar a segunda actividad en unos días y otros tantos a primeros de año, indican a este diario fuentes de Acaip-UGT. En cuanto a la vigilancia exterior en Herrera, destacan que sigue encargándose de la seguridad la Guardia Civil, ya no hay seguridad privada, algo lógico, según las fuentes. En la barrera hay un funcionario que controla el acceso desde dentro mediante el lector de huella, «un sistema que no funciona como debería».

Casi todos los funcionarios se han sometido a pruebas serológicas con resultado negativo. Algunos tienen anticuerpos, lo que quiere decir que ha pasado la enfermedad de COVID-19.