Castilla-La Mancha lidera en cantidad y calidad. Las explotaciones de aves de puesta representan un 30% de la producción del país. Pero además las exportaciones del sector del huevo llegan a los mercados internacionales más exigentes en cuanto a calidad. El nuevo presidente de la asociación Avicam, Juan Gigante Arcos pone el ejemplo de Israel o de Estados Unidos: “Hace unos años en una crisis que tuvo Estados Unidos, España fue el principal exportador y dentro de España, Castilla-La Mancha”.

Avicam es la asociación regional que agrupa a 130 avicultores. Juan Gigante, de Dagu, cogió este martes el relevo de la Presidencia a Juan Julián Sánchez, de Huevos Guillén, en una asamblea que clausuró el consejero de Agricultura. Pero además de acordar el relevo en la Presidencia, se presentó un protocolo para seguir aumentando en calidad.

Gigante expuso que el nuevo protocolo incluye “mayores medidas de bioseguridad en las explotaciones y nuevas exigencias de seguridad alimentaria de nuestro producto”. Una empresa auditora certificará la implantación de estas medidas y categorizará las explotaciones en función de su cumplimiento.

El consejero de Agricultura, Francisco Martínez Arroyo, saludó con alegría esta iniciativa. “Es difícil encontrar un sector que haga un compromiso adicional a lo que establece la normativa”, recalcó, “ellos lo han hecho y van a poder dirigirse a los consumidores con la mejor tarjeta de presentación”. Explicó que las explotaciones que vayan más allá de la normativa europea, tendrán un certificado especial que lo reconozca.

El presidente de Avicam apuntó otro reto que tiene el sector, apuntando a determinados “movimientos” que demandan una producción de gallinas “libres de jaulas”. Gigante aseguró que el sector está en ello: “Nuestro objetivo es atender las demandas del mercado y las necesidades del consumidor, quien nos va a marcar las pautas de futuro de nuestro negocio”. El consejero añadió que una tercera parte de las explotaciones de avicultura de la región son ecológicas.