Ciudad Real ha sido la provincia castellano-manchega que ha liderado la generación empleo en la construcción, concretamente 1.474 contratos el pasado mes de mayo, según los datos recogidos por la empresa Randstad, que ha llevado un estudio sobre el comportamiento del mercado laboral en este sector en la situación de desconfinamiento. Revela que en Castilla-La Mancha se firmaron en mayo 4.560 contratos en construcción frente a los 2.925 registrados en abril, lo que se traduce en un crecimiento del 56%, 17 puntos porcentuales más que la media nacional (39%). Este volumen supone el 4,9% del total que se han rubricado en España.
Por provincias, Ciudad Real, con los mencionados 1.474 contratos, y Cuenca, con 1.361, han sido las que más firmas han registrado de la comunidad, creciendo un 37% y un 60%, respectivamente con respecto a abril. Con volúmenes más discretos se sitúan Toledo, con 867 contratos (66%); Guadalajara, con 550 (104%), y Albacete, 308 (48%).
Para el presidente de la Asociación Provincial de Empresarios de la Construcción (APEC), Manuel Carmona, el hecho de que Ciudad Real lidere esta contratación se debe a que «el peso del empleo de la construcción sobre el total de ocupados es uno de los más importantes de España, no sólo por el trabajo que directamente se ejecuta en la provincia, sino por las empresas que trabajan fuera, con especial incidencia en Madrid y su área metropolitana. Por eso, en estadísticas de empleo, en Ciudad Real siempre estamos por encima de la media nacional», aseguró en declaraciones a este diario.
Igualmente, comentó que la parada en la construcción durante el estado de alarma «hizo que el empleo cayera de golpe, pero la reactivación del sector, de las obras de reforma y de las licitaciones de obra pública ha hecho que se dispare la actividad y que el sector demuestre lo que tantas veces decimos: que es un gran generador de mano de obra, que necesita muy poco tiempo para ponerse en marcha y que los resultados en el mercado de trabajo son claramente visibles en el corto plazo». Sin embargo, expresó su inquietud sobre el empleo a largo plazo, pues indicó que las obras en marcha son las ya iniciadas o aprobadas e incidió en la necesidad de inversión pública en forma de licitaciones, ayudas a la compra o rehabilitación de vivienda.