«Nuestro amplio territorio da mayor seguridad al consumo»

Hilario L. Muñoz
-

Los ERTE, el cierre de los comercios, la seguridad en la reapertura y la vuelta al empleo son los elementos que componen la crisis económica derivada de la sanitaria. La consejera Franco avanza aspectos del tiempo que llega con la nueva normalidad.

Nuestro amplio territorio dan una mayor seguridad al consumo - Foto: Pablo Lorente

¿Cómo se sale de esta parálisis económica de tres meses?

Nunca antes habíamos visto una situación así en la economía y no existe una crisis como precedente que permita analizar cómo vamos a salir y cómo va a ser la recuperación. Los estudios económicos plantean una caída brutal, como estamos percibiendo, y una relativa aceleración económica a partir del año que viene. En cuanto a cómo se va a producir la salida, ya sabemos que va a ser de manera desigual y que va a afectar de manera distinta a los diferentes sectores. Lo que estamos percibiendo en el ámbito autonómico, en lo micro, más allá de la caída del PIB del 8,8% que decía Funcas el otro día, por debajo de la media nacional, vemos que tras todos los ERTE que se han tramitado se está empezando a recuperar el empleo. Eso es una señal de recuperación en sectores como la industria o la construcción, que han sido los primeros en incorporar a sus equipos humanos. Ahora mismo, la previsión que tenemos es que de todos los trabajadores afectados por un ERTE en Ciudad Real es que, al menos, un 20 o un 25%, según indican fuentes de la Seguridad Social, se han incorporado a su puesto de trabajo. Lo que se ha perdido es el trabajo temporal y ahí es donde hay que concentrar los esfuerzos. 

¿Cómo espera los datos laborales de junio y sobre todo esa EPA de primeros de julio que mostrará lo ocurrido durante el estado de alarma?

El dato del paro lo estamos siguiendo y desde la Consejería hemos visto cómo tenía un muy buen comportamiento hasta mediados de marzo y, a partir de ahí, empezó la caída en picado y desde finales de abril se empieza a recuperar. Eso hizo que en el mes de mayo nos diera un respiro, con 5.000 trabajadores menos en situación de paro respecto al mes anterior. Lo que estamos viendo en estas primeras semanas de junio es una recuperación del empleo. La EPA va a ser más compleja de analizar porque en una situación así se desconfigura mucho y habrá que ser prudentes y cautos para ver cómo se va a recuperar. La situación más dura en términos de empleo la viviremos cuando finalice la prórroga de los ERTE. Está permitiendo contener el empleo hasta hoy y en el momento en que finalicen empezaremos a ver un mayor incremento en el desempleo. También hay que tener en cuenta que estos meses son de estacionalidad positiva en la comunidad autónoma, que la agricultura ha tirado suficientemente estos meses y que la construcción y la industria ha recuperado su empleo. 

Con la nueva normalidad hay muchos ayuntamientos que reactivan sus planes de empleo. ¿De qué manera va a cambiar este programa y que se haya modificado su inicio?

Con la suspensión de plazos administrativos por el estado de alarma, aquellos ayuntamientos que no habían iniciado las contrataciones no han podido iniciarlas y, por lo tanto, la finalización de los planes de empleo se han ido a mediados del mes de enero. A solicitud de la FEMP hemos ampliado los plazos de ejecución a reorientarlos a necesidades que antes no estaban y los hemos ampliado hasta el 31 de marzo y estamos valorando por tanto cuándo iniciar la próxima tacada de trabajadores en los planes de empleo. Hay que tener en cuenta la entrada del ingreso mínimo vital y el comportamiento que tenga en la parte más vulnerable de la sociedad y que va a modificar el tipo de usuario que puede ser beneficiario de las políticas activas de empleo. Primero porque muchas de esas personas antes beneficiarias de políticas de empleo serán beneficiarias del ingreso mínimo vital y porque entrarán nuevos perfiles al mercado laboral, como ha pasado en otras crisis, y lo que pretendemos es que no se conviertan en desempleados de larga duración porque eso es más complejo de digerir como sociedad. Ahí estamos poniendo en marcha medidas específicas para que estos trabajadores sean contratados en el ámbito privado y tener menos necesidad de incorporarlo a programas públicos. Tenemos bastante avanzado lo que llamamos el cheque COVID, que será un cheque que daremos a los trabajadores que finalizada su situación de ERTE o su contratación por el tema del COVID se vean fuera del mercado de trabajo y tengan un cheque para incentivar la contratación.

Si en la anterior crisis la exportación fue clave, ¿qué papel debe desempeñar en los próximos meses?

La internacionalización es clave porque vivimos en un mundo global y esta crisis lo ha puesto nuevamente de manifiesto y todo afecta, entonces, hay por un lado una recuperación del consumo interno, que hay que ver cómo se comporta, pero no podemos renunciar a todo lo que hemos avanzado en Castilla-La Mancha en materia de apertura internacional. La comunidad autónoma en los últimos años ha hecho un ejercicio inmenso de apertura internacional y relaciones internacionales y eso no lo podemos perder. Tenemos la capacidad de mantener el pulso a la internacionalización que se ha visto afectada en el primer trimestre del año y con los datos que conocíamos de abril, pero que también nos ha ido poniendo algunas luces en el comportamiento de las exportaciones, como la fuerte tirada de los productos agroalimentarios. Esta crisis ha puesto sobre la mesa la necesidad de tener una fortaleza industrial y se ha demostrado que la industria en el sector sanitario es vital para atajar una pandemia y, por tanto, creo que tenemos que hacer ciertas reflexiones y que deben ir reorientadas a mantener una fuerte industria europea, con mucha influencia en Castilla-La Mancha. Somos ese gran epicentro industrial del conjunto de España y podemos beneficiarnos con la capacidad de suelo, con las infraestructuras y excelente ubicación geográfica podemos beneficiarnos de muchas oportunidades de crecimiento industrial que tienen que ver con la internacionalización. Estos meses aún nos van a dar malas noticias en exportaciones porque se han cerrado las fronteras y la movilidad y eso, lógicamente, afecta a todo. 

Una de esas oportunidades de la crisis ha sido la aprovechada por el Aeropuerto de Ciudad Real, ¿cómo se valora este momento con la infraestructura llena de aviones?

Muy positivamente. Desde el inicio de la crisis se pusieron en contacto con nosotros para ofrecer sus servicios de corredor sanitario. El Gobierno de España junto con Fenin, Tecnobit e Iberia montaron un primer corredor y había espacio para otros corredores privados, como es el de Ciudad Real. Les ayudamos a hacer esos primeros contactos con la asociación de la industria farmacéutica y pudieron llegar esos primeros aviones con material de protección. El aeropuerto ya llevaba una estrategia de aprovechar sus magníficas instalaciones para que los slot de las compañías aéreas en los aparcamientos de larga estancia se pudieran concentrar en el aeropuerto de Ciudad Real. Llegó el COVID e implicó que no se movilizaran aviones al aeropuerto, pero en cuanto se han aperturado los vuelos las compañías han visto que es más eficiente tener los aviones aquí. Eso puede generar una industria de mantenimiento de aeronaves que estamos explorando con el aeropuerto.

Esta semana se cerró el plazo de ayudas de la Junta, ¿cuántos autónomos y micropymes la han pedido? ¿Cuándo se van a abonar?

Fue hace un mes cuando aprobamos el decreto en el Consejo de Gobierno y se publicó en el Diario Oficial y hemos tenido una alta demanda porque hay mucha gente que tiene que asumir pagos y no tiene ningún ingreso porque ha tenido el negocio paralizado. Tomamos el pasado domingo la decisión de pasar de 25 a 80 millones de euros y que ningún proyecto se quede fuera. Se han presentado más de 44.000 iniciativas, en el caso de Ciudad Real son más de 12.000 autónomos y micropymes que se verán beneficiados de esta línea de ayudas. Nunca había habido una convocatoria de 25 millones para autónomos en esta comunidad en toda la historia y menos de 80 millones. Desde que acabó el plazo, el lunes canalizamos las solicitudes y hacemos una tramitación muy rápida. El compromiso que queremos mantener para ser inmediatos en la llegada de liquidez es que la semana que viene empezaremos a enviar las resoluciones favorables; hay un plazo de diez días para hacer alegaciones y, a partir de ahí, empezar a pagar. Por lo tanto, en el mes de julio vamos a intentar que todo se quede abonado.

Buena parte de esas ayudas son para la seguridad ¿cómo puede afectar este concepto en la región? ¿De qué manera podemos hacer ver al resto de España que somos una comunidad segura, tras la incidencia que ha tenido el coronavirus aquí?

Damos claras muestras de que estamos trabajando muy responsablemente todos, la sociedad, los establecimientos comerciales y los negocios que reabren sus puertas, tampoco se nos pueden penalizar porque haya habido más casos. Antes hablaba de la implantación industrial por nuestra ubicación geográfica estratégica, en el centro de España, y esto tiene partes buenas y malas. Las buenas son la posible implantación en materia industrial aquí, pero una pandemia con grandes focos en la capital de España por la alta concentración de personas y porque somos una comunidad muy cercana en cuanto a las relaciones laborales, profesionales y sociales, con mucha gente que trabaja en Ciudad Real y vive en Madrid, ha tenido una afectación en la transmisión de la enfermedad. La rápida expansión de la enfermedad en esos primeros momentos en que la gente se movía y el virus se movía, no puede hacer que Castilla-La Mancha deje de ser un territorio seguro. Nuestra capacidad de amplio territorio, con los 80.000 kilómetros cuadrados de la comunidad, y la baja densidad de población, con dos millones de personas, con un turismo y una actividad muy centrados en naturaleza y espacios abiertos, da una mayor seguridad y tranquilidad para el consumo. Eso es parte de la campaña lanzada esta semana con una campaña de comercio y hostelería más segura, para reconocer el esfuerzo que han realizado para garantizar la seguridad.