La campaña de cereal de este año dejará alrededor de un 25 por ciento menos de producción que el año pasado en la provincia de Ciudad Real, cuando se registró una cosecha «excepcional» en cuanto a producción, por lo que se considera que será una «campaña media-buena», según las previsiones realizadas esta semana por Cooperativas Agroalimentarias de Castilla-La Mancha y que dio a conocer a La Tribuna el portavoz de la Sectorial de Cultivos Herbáceos, José María Ciudad. 

Así, detalló que tras una cosecha en 2020 «histórica», la previsión es que este año se reduzca en volumen y que lo haga en torno a un 15 por ciento en el conjunto de Castilla-La Mancha y «entre un 25 y un 30%» en la provincia de Ciudad Real que junto a Toledo, serán los territorios que registrarán un mayor descenso, mientras que Guadalajara y Albacete «calcarán casi» los datos del año pasado y Cuenca registrará una disminución de alrededor de un 10%. En el caso de Ciudad Real, el descenso viene motivado por el menor volumen de precipitaciones que se ha registrado y por la afectación de las heladas en algunas zonas. 

La previsión de Cooperativas Agroalimentarias varía sobre la realizada ayer mismo en la Sectorial del Cereal de Asaja, que pronostica una campaña «media, inferior a la del año pasado, que fue alta» en la provincia, con una merma de producción de «entre un 20 y un 25 por ciento, más acentuada en unos sitios que en otros», informó a este diario el gerente de la Asociación Agraria Jóvenes Agricultores (Asaja) de Ciudad Real, Agustín Miranda. Así, estima una producción de unas 650.000-680.000 toneladas en la provincia, unas 200.000 menos que el año pasado. 

Ambos coincidieron en señalar que la cosecha será «irregular», con diferencias en producción en las distintas zonas de la provincia. Así, en la zona de Campo de Calatrava, en municipios como Ciudad Real, Miguelturra, Picón o Carrión, el descenso de la producción puede ser «del 20% sólo» en relación con el año pasado, mientras que en puntos de esta comarca como Bolaños, Almagro o Granátula, la disminución se puede disparar hasta el 40 o el 50%. En el caso de La Mancha, en municipios como Daimiel, Manzanares o Membrilla, el retroceso podría situarse en torno al 20%, mientras que en el valle de Alcudia rondará entre el 35 y el 40% y en el Campo de Montiel, alrededor del 40 por ciento, según las estimaciones de Cooperativas Agroalimentarias. 

los precios. La buena noticia para los productores es que si el año pasado «empezó muy mal» en cuanto a los precios, «desde septiembre y octubre todo cambió», de manera que ahora se han alcanzado precios en «máximos históricos» en productos como el maíz. «A corto plazo parece que a van a mantenerse» debido a la reducción de la cosecha que se prevé y a lo poco que queda almacenado, comentó Ciudad sobre los «precios disparados» que hay en la actualidad, a escasos días de que arranque la campaña, que podría iniciarse la última semana de mayo en algunos puntos y generalizarse en la primera y segunda semana de junio. 

«Los precios son altos, mucho más altos que el año pasado», constató el representante de Asaja Ciudad Real, quien recordó que «rondan los 200 euros la tonelada, mientras que el año pasado estaban por debajo de los 150». En el caso de la provincia, la reina de los cereales es la cebada, que ocupa la mayor superficie de producción, seguida del trigo y de la avena. 

En el conjunto de España, Asaja vaticina una campaña de cereales «en la media de los últimos años», con unos rendimientos desiguales, bajada de producción en la zona sur e incertidumbre en el centro y norte del país, informó la organización nacional en un comunicado en el que añaden que los productores aprovechan, además, «para pedir medidas que den solución a los principales problemas que sufre el sector».