Poco a poco, el temporal que desató en el Vestas Alarcos la dimisión en bloque de su cuerpo técnico va amainando. El paso de los días y, sobre todo, la balsámica victoria del sábado ante el Villa de Aranda (25-21), segundo clasificado, están logrando que las aguas vuelvan a su cauce y que la normalidad regrese al club de Ciudad Real, que ahora se centra en despedir el año del mejor modo posible en la pista de otro de los aspirantes al ascenso, el Torrelavega (sábado, 18.30 horas). 

El equipo que dirige Javier Laguna demostró ante los burgaleses que «somos uno, que vamos a muerte», en palabras de su capitán, Brian Negrete, uno de los más destacados del partido, autor de siete tantos. El extremo alarquista recordaba que «no se nos ha olvidado cuál es nuestro objetivo», en referencia a volver a luchar por el ascenso a la Liga Asobal.

Negrete tenía palabras de elogio para todos sus compañeros, «todos listos para cuando se les necesitara», y señalaba especialmente a los porteros, Javi de la Cruz y Óscar Ruiz, que «siempre están ahí».

El capitán del Vestas Alarcos ya sólo piensa en cerrar el año con una victoria en Torrelavega, en lo que en teoría podría ser el último partido de Javier Laguna en el banquillo. Brian Negrete también alababa la llegada del sustituto de Javier Márquez:«Javi Laguna nos ha dado lo que necesitábamos, una palmada en la espalda, diciéndonos que hay que tirar para adelante, que confía en nosotros y reconociendo el trabajo que llevamos atrás con Javi Márquez y su equipo, que ha sido de quitarse el sombrero».