Ciudad Real baja a riesgo medio por la caída de contagios

Hilario L. Muñoz
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Los datos del Ministerio de Sanidad apuntan a un descenso de la incidencia acumulada y de la positividad de las pruebas realizadas por el Servicio de Salud de Castilla-la Mancha en la provincia

Valdepeñas y Villarrubia, en nivel 3 ante el COVID - Foto: Rueda Villaverde

La provincia de Ciudad Real ha regresado a una situación de riesgo medio en los valores que marca el Ministerio de Sanidad y que hace públicos cada semana. Las cifras en la provincia de Ciudad Real reflejan una caída de la incidencia acumulada, tanto en la población en general como en mayores, así como un descenso en la positividad, el porcentaje de pruebas que son positivas sobre el total, y que ayudan a reducir la incidencia de la pandemia. El único dato preocupante siguen siendo las UCI, en situación de riesgo extremo con una ocupación del 27,5 por ciento, un dato estable, pero que muestra la dureza de la pandemia y la necesidad de seguir manteniendo las medidas sanitarias así como los consejos de la Consejería de Sanidad. 

En datos concretos, Ciudad Real es una de las 18 provincias con alerta 2, ese nivel medio de riesgo. En un riesgo más bajo se sitúan Albacete y Cuenca, alerta 1, mientras que Toledo y Guadalajara continúan en los datos del Ministerio, cerrados el pasado lunes, en riesgo extremo y alto, respectivamente. 

En datos, la situación que señala el Gobierno de España es que al cierre de la pasada semana había una incidencia de 145,2 casos por cada 100.000 habitantes, 56 si solo se toman los últimos siete días. Este dato es clave porque marca el descenso de la curva de contagios a la que ya apuntan los datos por municipios que publica la Junta de Comunidades cada jueves y que señalan un descenso drástico de contagios en los días previos al final del estado de alarma.  Por hacer una idea, en la estadística previa del Ministerio, el dato estaba 171,1 y 76,6 casos a catorce y siete días. Mientras, la incidencia referida en exclusiva a los mayores de 65 años se sitúa en 104,4 casos a catorce días y 34,8 a siete. Todas las cifras, salvo la de incidencia a dos semanas en mayores de 65 años, concuerdan con ese escenario de alerta 2 marcados por el Ministerio de Sanidad.

Mientras, las cifras mejores se encuentran en la positividad, situada en el 6,5 por ciento. Es decir de cada cincuenta pruebas PCR o test que se hacen en los centros sanitarios de la provincia solo 13 dan positivo. Además, la trazabilidad se sitúa en el 74 por ciento de los casos, por lo que siete de cada diez contagios se conoce su procedencia. Este aspecto es cada vez más clave para frenar la pandemia y mantener esta situación en la que se pueden controlar los focos, acotando el cerco de los nuevos casos y evitando que haya personas asintomáticas. Ambos parámetros se sitúan en lo que se denomina riesgo bajo, o alerta 1 por el Ministerio. 

En cuanto a la hospitalización, la línea descendente que cada día ofrecen los datos de la Consejería de Sanidad se escenifica en que solo el 3,7 por ciento de las camas de planta se encuentran ocupadas. El mal dato está en las UCI, ya que la duración de la enfermedad cuando necesita técnicas de respiración invasiva, hace que sean días si no semanas, lo que costará hacer descender el dato.