"No se puede pretender que por estar en centros residenciales su vida se limite a comer, beber y dormir. Nadie queremos eso para nosotros y algún día llegaremos, antes o después". Lo avisa Pilar López, que trabaja en el sector de las residencias en Castilla-La Mancha y es miembro de Marea de Residencias Castilla-La Mancha. Esta mañana se concentraron delante de Zocodover para hacer oír sus reivindicaciones.
Explican que una de las más sencillas de aplicar sería la de aumentar la plantilla y tener equipos multidisciplinares en todos los centros, con profesionales de diversos perfiles como psicólogos y trabajadores sociales. "¿Qué tipo de atención y cuidado integral se puede dar una persona cuando no tienes un psicólogo, un trabajador social?", plantea.
En su manifiesto dejan claro que lo que quieren son residencias públicas de calidad y avanzar a un modelo de atención centrado en la persona. López explica que esta plataforma nació a raíz de varias iniciativas de asociaciones y grupos de familiares que se formaron para abordar problemas concretos de algunas residencias. Ahora se han unido para hacer reclamaciones que afectan a todo el sector. Además de reclamar más profesionales, también piden que tengan mejores condiciones laborales. "Es un personal muy denostado, con salarios ínfimos, con carga de trabajo, con unas condiciones laborales muy precarias, que lo único que está generando es estrés en las plantillas, ansiedad y gran número de lesiones", avisa.
Piden una Ley estatal de Residencias que exija unos mínimos - Foto: EFE (Ángeles Visdómine)Aunque sea una plataforma regional, una de sus reivindaciones va directamente al Gobierno de España. Otro de los miembros de Marea de Residencias, Javier Garzón, reclama una Ley de Residencias, "que marque unos mínimos en todo el Estado, que haya igualdad de trato independientemente de donde se viva, que sea la base para dignifica rel sector, un sector que está altamente privatizado".
Garzón avisa de que los problemas en las residencias venían antes del coronavirus, pero que ha sido ahora cuando se han hecho más visibles. Pilar López apunta que las tasas tan elevadas de mortalidad por esta pandemia en estos centros se debe a que "han sido los últimos en recibir atención médica", dado que señala que por "su edad, sus dolencias o por estar en un centro residencial eran los últimos en ser derivados a los hospitales". Apunta que en Madrid hay litigio por los protocolos que se promulgaron. No ha sido así en el caso de Castilla-La Mancha, aunque apunta que aquí "de alguna forma" también ocurrió que "al final los mayores han sido los últimos en ser atendidos y en muchos casos no se han derivado".