Un joven de 22 años ha admitido en la Audiencia Provincial de Ciudad Real que hace tres años le arrancó dos dientes a otro varón de un puñetazo en la boca cuando se encontraban en un discobar de Ciudad Real.

Tras el reconocimiento expreso de los hechos ocurridos la madrugada del 22 de octubre de 2017, el acusado, de iniciales V. L. M.D., ha aceptado una pena de tres años y ocho meses de cárcel. Del mismo modo, según ha explicado a este diario el abogado de la acusación particular Ángel Rico, el encausado se ha comprometido a indemnizar con algo más de 21.000 euros a la víctima por el daño y perjuicio ocasionado. También, se le han impuesto medidas de alejamiento respecto a la víctima por un periodo de cinco años.

El letrado Ángel Rico pedía inicialmente una condena de cinco años de prisión. Esta mañana se ha llegado a un acuerdo de conformidad tras admitir el acusado los hechos ocurridos en un conocido discobar de la capital sobre las seis de la madrugada del 22 de octubre de 2017.

El acusado ha reconocido ser autor del delito de lesiones que se le imputaba, esto es, haber propinado un fuerte golpe en la boca a otro joven de 23 años hasta arrancarle dos dientes.

Por estos hechos, según se recoge en el escrito de la acusación de la Fiscalía, ya fue condenado el 27 de octubre del 2017 por el Juzgado de Primera Instancia  e Instrucción número 5 de Ciudad Real a medidas de alejamiento. Se le prohibió aproximarse a la víctima, a su domicilio, lugar de trabajo o estudios, o donde quiera que se encontrara a una distancia igual o inferior a 200 metros. Ahora se le han vuelto a imponer medidas de alejamiento y comunicación por cualquier medio respecto de la víctima, indicó ayer la acusación particular.