La concienciación eleva un 10% el reciclaje de fármacos

M. Lillo
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La provincia registró el año pasado una media de 125,04 gramos de envases vacíos o con restos de medicación por habitante, un aumento del 9,48% en cinco años

La concienciación eleva un 10% el reciclaje de fármacos - Foto: Tomás Fernández de Moya

Cada vez hay más concienciación sobre el reciclaje en general y también sobre el reciclaje de fármacos. Así se constata en los datos de recogida de envases y blísteres de medicamentos que los ciudadanos han ido depositando en los puntos Sigre de las farmacias de la provincia. En concreto, a lo largo del pasado año se recogieron una media de 125,04 gramos de envases, vacíos o con restos de medicamentos, por habitante, según los datos facilitados a este diario por Sigre y que sitúan a la provincia por encima de la media estatal, que apenas supera los 100 gramos.

«La colaboración ciudadana ha mejorado en la provincia de Ciudad Real una media del 9,48 por ciento durante los últimos cinco años», informaron desde Sigre en relación con la evolución que ha seguido el uso de los puntos Sigre de la provincia, un total de 307 ubicados en las farmacias que hay repartidas por todo el territorio ciudadrealeño.

A esa mayor concienciación ciudadana se refirió el presidente del Colegio de Farmacéuticos de Ciudad Real, Francisco Izquierdo. «Se hace un buen trabajo a la hora de concienciar para que todo el desecho de los medicamentos se canalice a través del Sigre», una entidad sin ánimo de lucro cuya actividad se centra en el reciclaje y tratamiento medioambiental de envases y residuos de medicamentos. De hecho, hace que hace apenas dos días lanzó una campaña en la que pone el foco en los envases y en los restos de antibióticos. No obstante, Izquierdo puntualizó que esos datos de reciclaje «no quieren decir que se tiren más medicamentos, pues hay que recordar que Sigre lo que principalmente recoge son envases y blísteres y aunque es cierto que hay muchas cajas que llevan algo de medicación, algo de contenido, no es lo mayoritario», puntualizó poniendo como ejemplo un jarabe que se consume y que cuando se deposita al punto Sigre puede contener restos del medicamento.

De este modo, explicó que hay «muchos medicamentos que pueden caducar en casa, como el típico analgésico que se toma para cuando duele la cabeza y que al final si no te duele, mejor, y termina caducando en el botiquín. Este sí es el tipo de medicamento que se recicla», dijo Izquierdo. Además, agregó que en otros casos se depositan en estos puntos los medicamentos que, por cualquier causa, no han sentado bien a los pacientes, mientras que recordó que la producción de fármacos también se ha ido adaptado al número de días del tratamiento, por lo que «no suelen sobrar», aunque en algunos casos el paciente puede no completar el tratamiento y desecharlo después.

Uno de los objetivos fundamentales de los puntos Sigre es reducir el impacto medioambiental que pueden tener los medicamentos o los restos de los mismos debido a los productos químicos que se utilizan para su fabricación, motivo por el que su tratamiento de desecho se debe realizar de manera adecuada.

«Las farmacias tienen los contenedores, que pone Sigre y que están a disposición de toda la red de farmacias y que también vienen acompañados de unas bolsas, de manera que cuando están llenas nosotros se las pasamos a nuestro distribuidor habitual, todos los distribuidores participan en esta acción, y ellos lo llevan a Sigre para su procesado», detalló Izquierdo sobre el procedimiento que se sigue en estos casos.

De este modo, poco a poco ha ido calando en los ciudadanos una concienciación medioambiental que también está motivada por la realización de campañas de sensibilización.

‘Di sí a Sigre. Di sí al medio ambiente’ es el lema con el que se ha lanzado la campaña de esta semana y con la que se pretende concienciar sobre la importancia de reciclar correctamente envases, vacíos o con restos de medicamentos, para proteger la salud pública y cuidar de la naturaleza.

También se refirió a esta cuestión el presidente del Colegio de Farmacéuticos, quien vinculó esa mayor concienciación ciudadana con la realización de también de «diversas campañas a lo largo de todo el año», por lo que el perfil de los usuarios de los puntos Sigre «es variado».

Por último, Izquierdo destacó «el papel del farmacéutico, que es el único profesional que está en toda la vida del medicamento, desde que se hace la síntesis de la molécula, las primeras pruebas de actividad, fabricación, distribución, dispensación en oficina de farmacia o en el hospital y más tarde, cuando se termina de tomar el paciente la medicación, también en el reciclado», concluyó.