Ciudad Real roza ya la nueva normalidad, al menos, en lo que se refiere a su situación epidemiológica en la batalla contra el coronavirus. Según el Instituto de Salud Carlos III, la incidencia a 14 días sigue retrocediendo y este martes quedaba en menos de 30 puntos en la provincia, una cifra que se consigue por primera vez desde el inicio de la pandemia y que demuestra la eficacia de la vacunación contra el SARS-CoV-2, doblegado en territorio provincial.

Eso sí, aún quedan una venintena de personas ingresadas en tres hospitales de la provincia: 10 en Alcázar de San Juan, dos en Tomelloso y dos en la capital, a los que se suman seis pacientes más en las Unidades de Cuidados Intensivos de Alcázar y Ciudad Real, según avanzó ayer el consejero de Sanidad, Jesús Fernández, desde Puertollano, donde ya no quedan positivos ni en cama convencional ni en la unidad de críticos.

A pesar de eso, Ciudad Real es la provincia de la región donde hay más personas en los hospitales por culpa del COVID-19, mientras que Sanidad notificaba 18 nuevos contagios por la provincia. En la última semana son 87 las infecciones confirmadas con datos de la dirección general de Salud Pública. Desde hace 15 meses no se registraban una cifras similares en la provincia.

En las residencias de mayores, Sanidad mantiene la alerta por coronavirus en un centro, donde uno de los residentes se mantiene como caso activo por el virus. En la región apenas son otras dos residencias más las que sufren esta situación, que afecta a cuatro mayores que ocupan plaza en uno de estos servicios sanitarios en Castilla-La Mancha.