Ciudad Real mantiene dos años consecutivos de crecimiento en el número de personas que cuentan con un seguro sanitario privado. Si al cierre de 2016 la cifra se encontraba al borde de los 60.000, al final del año pasado el incremento de contratos se ha elevado a casi 65.000 personas con contratos en alguna modalidad de seguro sanitario. El seguro que más aumenta es el de subsidios e indemnizaciones, en el que la persona afectada por una enfermedad cobra una cuantía de forma independiente a su recuperación. Se trata de un seguro clave por ejemplo, para los autónomos, que reciben una compensación económica cuando se ponen enfermos.  

De este modo, según los datos facilitados a La Tribuna de Ciudad Real por la Asociación Empresarial el Seguro (Unespa), al cierre de 2018 la provincia contaba con 64.988 pólizas de seguro contratadas. Supone un incremento del 4,49 por ciento respecto a los datos del año 2017. Solo Toledo supera en asegurados a la provincia de Ciudad Real en Castilla-La Mancha, con 128.858 personas. El volumen del negocio en la provincia es de 39.310.22,94 euros, lo que implica un crecimiento del 5,8 por ciento respecto al pasado año. Por lo tanto en 2018 se contrataron pólizas más caras que en el año anterior. 

La provincia contaba en el año 2008 con 52.232 seguros y dos años después llegó hasa los 52.774. El crecimiento era práctica nulo en ese periodo y muestra que antes de la crisis económica apenas se movía la cifra de personas aseguradas. Con la recuperación económica el ritmo Así, de los 58.268 seguros privados que hubo en 2015 se pasó a los 60.216 del año 2016 y a los 62.181 de 2017. Se trata de un ritmo de crecimiento que se ha ido acelerando y ha pasado de apenas un 1 por ciento anual a un dos por ciento en los años de la crisis hasta el tres y cuatro por ciento que se detecta en la actualidad. De hecho el incremento de este 2018 es el mayor de los registrados con un 4,5 por ciento. Las cifras muestran un incremento del 25% en una década.

A pesar de esta aceleración que se está produciendo en los contratos de seguros privados, Ciudad Real está por debajo tanto de la media de asegurados respecto al resto de provincias como del incremento ocurrido en España, donde han aumentado en un 4,88 por ciento las personas que tienen alguna modalidad de seguro. 

En el detalle, la modalidad que más aumenta es ese seguro de subsidios e indemnizaciones y que tienen ya tienen 9.414 ciudadrealeños. Su cifra se ha incrementado del 11,60 por ciento. Estas personas pagan un total de 1.485.122,9 euros en primas a cambio de recibir una cuantía fija cuando tienen un resfriado, se quedan embarazadas o deben acudir a una operación. La provincia en este caso se sitúa tras Toledo, con 17.770 asegurados, y Albacete, con 12.903 asegurados. 

Le sigue el seguro destinado a la asistencia sanitaria que tienen ya 53.858 personas, tras aumentar en un 3,59 por ciento en el último año. En este caso Ciudad Real sí se encuentra solo superada por Toledo donde hay 104.628 pacientes de la sanidad privada. El importe de primas que paga Ciudad Real es de 36.493.162,29 euros, según los datos facilitados por la asociación del seguro al referirse a la asistencia sanitaria. 

La última modalidad de seguros es la de reembolso de gastos, en el que se devuelve el importe de las facturas abonadas. Hay 1.716 personas con este tipo de seguros, el único que cae en la provincia, en un 3 por ciento. Se trata de una modalidad que se está reduciendo, según los datos de la organización.

Detrás de los datos del incremento de los asegurados se encuentran tres aspectos claves en opinión del ex vocal del Colegio de Médicos de Ciudad Real de la Atención Privada, Alejandro Rosa, médico pediatra y recientemente jubilado. El primero es el horario de la Seguridad Social, ya que para Rosa la posibilidad de acudir fuera del horario del trabajo es importante para cualquier persona. «El horario que tiene la Seguridad Social no coincide con el tiempo libre de los padres» por lo que con un seguro privado se amplía la posibilidad de acudir a la sanidad pública o privada y «es más fácil la atención médica al no tener que pedir continuamente permisos en la empresa» tanto para un enfermo como para sus familiares. 

Un segundo factor, en opinión de este médico que ha trabajado durante años en ambas áreas de la sanidad, se encuentra el precio de los seguros. En este caso señala que este abaratamiento es «a costa de pagar poco al médico». En este sentido, Rosa recuerda que estos seguros sanitarios se firman con compañías de seguros generales, no específicas, como muestra de ese abaratamiento. 

Por último, Rosa, quien recientemente ha dejado la vocalía del seguro privado por jubilación, indica el tiempo y la espera como elementos claves al elegir un seguro privado. «El tiempo de atención en la pública está estipulado entre siete y diez minutos» pero hay personas que buscan «una segunda opción médica» que atiendan durante mayor tiempo. Además se encuentra la lista de espera porque «el cuidado de la salud es muy importante» y los enfermos buscan dentro de sus posibilidades, por lo que un seguro amplía las opciones de resolver un problema sanitario.