Las Fuerzas de Seguridad del Estado en la provincia asestaron tal golpe contra el tráfico de tabaco de contrabando este verano que Ciudad Real se ha convertido en el segundo territorio de España que más tabaco ilegal ha aprehendido en lo que va de 2021. Así lo señalan los datos del Ministerio de Hacienda, a los que ha tenido acceso La Tribuna, y en los que se indica que en junio se han sacado del mercado 44.000 toneladas de picadura y 130.500 cajetillas de tabaco. Solo Valencia, con una operación en la que se incautaron 750.778 cajetillas y 63.530 toneladas, supera los datos de los efectivos ciudadrealeños. Entre ambas provincias se ha incautado más de la mitad del tabaco que se ha aprehendido en España durante los primeros seis meses de este año. Ciudad Real aporta un 22 por ciento de todo el tabaco ilegal que no se pondrá a la venta este año. 

Detrás de estas cifras está una de las grandes operaciones llevadas a cabo contra el contrabando de tabaco y la detección de un grupo con ramificaciones en varias provincias y un presunto centro de fabricación de tabaco ilegal en una nave de Manzanares. «La operación tuvo mucho que ver, pero también que, en cuanto al tabaco picado de contrabando, Ciudad Real es una de las provincias más afectadas de España». La frase es la que pronuncia el presidente de los estancos ciudadrealeños, Fernando Bermejo, quien lleva años recordando que los establecimientos tienen que competir contra empresas de internet y el tabaco ilegal, lo que ha provocado una caída de las ventas oficiales y de paso, de los ingresos por impuestos del tabaco en la provincia que suma el Estado.

Una incautación tan grande de tabaco en la provincia no ha tenido un efecto en los establecimientos y no han crecido las ventas. «Ese tabaco no se quedaba en la provincia de Ciudad Real, se distribuía por todos sitios». Con todo, una cantidad decomisada como la que ha habido en la provincia durante 2021 tiene un efecto en la recaudación de impuestos, porque cada tabaco ilegal que se compra implica una pérdida de ingresos para toda la sociedad. 

El presidente de los estancos señaló que esta cantidad de tabaco decomisado permite mostrar que los cigarrillos y la picadura ilegal existen y son una realidad tangible en una provincia como esta. «Hay estudios que demuestran que mucha de la caída de las ventas del tabaco legal viene por parte de que hay un mercado sin ningún tipo de control, no solo económico sino también sanitario». Bermejo apuntó que las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado siguen haciendo su labor, pero es necesario sumar esfuerzos legales como una trasposición de ley europea, pendiente de realizarse, para evitar que las detenciones por tabaco ilegal no se salden con amplias penas de cárcel.