El presidente de la Junta de Comunidades de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, ha considerado que, teniendo en cuenta la evolución positiva de la pandemia, cuando acabe la temporada de la gripe, "en febrero o por ahí", se podría plantear la posibilidad de quitar la obligatoriedad del uso de la mascarilla en espacios interiores.

En Belmonte (Cuenca), donde ha inaugurado unas instalaciones deportivas, el presidente castellanomanchego ha apuntado que ya hace quince días que la comunidad autónoma levantó todas las restricciones relacionadas con el coronavirus y ha expresado su opinión personal de que cuando pase la temporada de la gripe, se podrá plantear retirar la obligatoriedad del uso de mascarillas en espacios interiores, toda vez que ya no es obligatorio en exteriores.

En cuanto a la evolución de la pandemia en la comunidad autónoma tras la retirada de las restricciones, ha subrayado que este viernes hay la mitad de incidencia, la mitad de ocupación de camas UCI y la mitad de casos que hace quince días.

Por ello, ha celebrado que la vacuna "está tirando, la gente está cumpliendo mejor que en Europa" y ha celebrado que "cuando se ponerse una vacuna, una mascarilla, la gente no lo discute, la gente tiene claro lo que importa".