El Pleno del Ayuntamiento de Ciudad Real de este jueves debatirá la aprobación de una serie de proyectos de inversión con cargo al superávit del pasado año entre los que se encuentra una partida de 522.000 euros destinada a la adquisición de vehículos para la Policía Local. Se trata de una inversión con la que se busca renovar dos tercios de la flota de vehículos, en concreto 22 de los 33 con los que cuenta el servicio municipal. El objetivo es rejuvenecer un parque que de media tiene casi once años de antigüedad, pese a que hace cuatro se adquirieron nuevos vehículos o hace dos años motos. 

Los 22 vehículos que se sustituirán serán dados de bajas y en ellos se incluyen tanto motocicletas, como furgonetas o automóviles. Fuentes municipales recordaron que el equipo de Gobierno de Ciudad Real lleva desde la pasada legislatura trabajando en esta renovación del parque móvil y el objetivo es que el Plan Renovación, como se llama en los informes con el que la propuesta llega a Pleno, se finalice en el primer semestre del año 2020.

La intención del Consistorio es realizar el cambio de estos 22 vehículos a partir de cinco lotes diferentes que tendrían que salir a licitación, una vez que este jueves el Ayuntamiento dé el visto bueno al gasto. El mayor lote es el destinado a la adquisición de seis vehículos híbridos, entre los que hay dos 4x4, tres SUV(turismos) y una berlina, esta última sin rotular, con un importe de 205.000 euros. El segundo lote con 160.000 euros serán cuatro SUV, también híbridos, y que tengan un kit para llevar detenidos, por 160.000 euros. Además se adquirirán seis motocicletas para la unidad de tráfico y otras cuatro, tipo scooter, y que estarán destinadas a una de las novedades que se quiere implantar en la Policía Local como son las unidades de distrito, ambos lotes está previsto que se liciten por 94.000 euros. Por último se adquirirán dos furgonetas dedicadas a las unidades de investigación y de educación vial, por 63.000 euros. Estos vehículos tendrán una vida útil de ocho años. 

El cambio implicará que el parque móvil reduzca su antigüedad media de 10,96 años, ya que se darán de baja todos los vehículos que tengan entre 9 y 20 años, así como uno de tres. La edad media se quedará en 1,8 años, lo que muestra el profundo cambio que se quiere dar al parque móvil. 

La intención además busca una reducción de los gastos municipales ya que con los nuevos usos de consumo se estima que puede haber un ahorro de 800 euros por vehículo y año en el mantenimiento durante los cinco primeros años, lo que implica unos 17.600 euros anuales así como 88.000 euros en el primer lustro. Como segundo aspecto habrá un ahorro en el combustible, que puede implicar unos 15.000 euros anuales aproximadamente, según el informe redactado por el servicio municipal de cara al Pleno y al que ha tenido acceso La Tribuna de Cuidad Real. La incidencia completa de este cambio puede suponer un ahorro de 30.383 euros por año.