El Brexit también salpica a Corbyn

SPC
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Siete parlamentarios laboristas dejan el partido, aunque seguirán en la Cámara como grupo independiente, al censurar que el líder progresista rechace un segundo referéndum y le acusan de seguir una política antisemita

El Brexit también salpica a Corbyn - Foto: TOBY MELVILLE

 

El debate sobre el Brexit no solo sacude los cimientos de un Partido Conservador fragmentado alrededor de la postura de la primera ministra, Theresa May. También sacude al principal bloque opositor y ayer quedó patente, tras la dimisión de siete diputados laboristas, que anunciaron que abandonan la formación política por sus discrepancias con el líder progresista, Jeremy Corbyn, y que seguirán en el Parlamento como grupo independiente.

Chuka Umunna, Luciana Berger, Chris Leslie, Angela Smith, Mike Gapes, Gavin Shuker y Ann Coffey tomaron esta decisión en plenas discusiones sobre la estrategia a seguir en el proceso de divorcio del Reino Unido de la UE y justificaron su salida al asegurar que no pueden continuar en una fuerza «institucionalmente antisemita», según palabras de Berger. «Desde hoy, todos nos sentamos en la Cámara como un nuevo grupo independiente de parlamentarios», agregó.

Leslie, por su lado, denunció que el laborismo ha sido secuestrado por «la maquinaria de izquierda», mientras que Ummunna subrayó que los partidos actuales son parte del problema y no de la solución en el país británico. «Es el momento de que abandonemos la política antigua», aseguró, al tiempo que añadió que la nación precisa un bloque «preparado para el aquí y el ahora» e hizo hincapié en que el «primer paso debe ser abandonar la política tribal». 

«No te sumas a un partido político para jugar contra las personas que están dentro», afirmó el diputado, antes de contar que el nuevo grupo tendrá su primera reunión en los próximos días. «La política está rota. No tiene que ser así. Cambiémosla», aseveró. 

Los siete dimisionarios presentaron su nuevo grupo parlamentario y justificaron su salida del laborismo por su rechazo a la estrategia de Corbyn con el Brexit, especialmente por negarse a apoyar un segundo referéndum, y por entender que sería «irresponsable» apoyar al líder progresista como primer ministro por su posición en temas internacionales y con respecto a la OTAN. 

Tras conocer la salida de los siete parlamentarios, el propio Corbyn se declaró «decepcionado» por su marcha y lamentó que no se vean capaces de seguir defendiendo las políticas laboristas, que «inspiraron a millones de personas en las últimas elecciones». 

«El Partido Laborista ganó con un programa hecho para muchos y no para unos pocos, por la redistribución del poder y la riqueza, llevando los recursos vitales a la propiedad pública, invirtiendo en cada región y país y afrontando el cambio climático», indicó. «El Gobierno conservador está echando a perder el Brexit, mientras que el Laborista ha fijado un plan alternativo creíble y de unión», zanjó.