La provincia de Ciudad Real se encamina hacia un año de marea baja en materia de exportaciones. Así al menos lo anticipan los datos de la primera mitad del año, que sitúan al territorio ciudadrealeño por debajo de los 1.000 millones de euros en el primer semestre del ejercicio por primera vez en los tres últimos años, después de retroceder un ocho por ciento en las ventas exteriores en los seis primeros meses del presente año. Pese a esa caída, las cifras publicadas en la jornada de ayer por el Instituto de Comercio Exterior mantienen a las empresas provinciales al frente de las exportaciones en el conjunto de Castilla-La Mancha, aunque la distancia con sus perseguidores es cada vez más estrecha, ya que los 951,96 millones de euros facturados en el extranjero desde Ciudad Real entre los meses de enero y junio superan, por poco, lo más de 920 millones de euros en ventas desde la provincia de Toledo y los 917,35 millones de euros en ventas exteriores de la provincia de Guadalajara. Entre los tres territorios suman más de dos terceras partes de las ventas totales en el extranjero de Castilla-La Mancha, que también caen hasta junio.

El objetivo de superar por tercer año consecutivo los 2.000 millones de euros en exportaciones desde la provincia de Ciudad Real se aleja. Después de caminar dos años a golpe de récord, las ventas exteriores de las empresas ciudadrealeñas acumulan una caída del 8 por ciento en los primeros seis meses del año, sumando 951.965.320 euros entre los meses de enero y junio, el último computado hasta ahora por el Instituto de Comercio Exterior (ICEX). El registro queda en los primeros lugares dentro del ranking de la última década, pero palidece en alguna medida ante sus antecesores más inmediatos: 1.044,77 millones de euros en los seis primeros meses del año 2017 y 1.025,94 millones de euros entre enero y junio del pasado ejercicio, cuando la provincia cerró el año superando de nuevo los 2.000 millones de euros en ventas en el extranjero por segunda vez en su historia. El desglose mensual del inicio del presente año ya hacía presagiar una cierta relajación en el pulso exportador desde el territorio ciudadrealeño, que coincide con un contexto de desaceleración en las ventas exteriores en la región, no así en el conjunto del país aunque en ellas también se perciba una desaceleración en el crecimiento.

En el caso de España, vinculada a la batalla en el mercado del automóvil, uno de los baluartes de ventas exteriores nacionales, las ventas exteriores han caído más de un 6 por ciento con respecto a mayo y experimentan un crecimiento del 1,7 por ciento en términos interanuales, el menor de la serie para un mes de junio. En la región, la caída se lima hasta las dos décimas, y las exportaciones se mantienen en el primer semestre del año en el entorno de los 3.600 millones de euros impulsadas sobre todo por tres provincias: Ciudad Real, que supera los 951 millones de euros; Toledo, que supera a Guadalajara y se sitúa en 920,48 millones de euros; y Guadalajara, que bate los 917 millones de euros en los primeros seis meses del año. Por detrás quedan Albacete (560,9 millones) y Cuenca (246 millones de euros).

 un semestre de caída. Para buscar los síntomas de la desaceleración en las ventas exteriores de la provincia de Ciudad Real no hay que irse muy lejos y basta con poner la lupa sobre el sector bandera de las exportaciones provinciales, el sector del vino, que suma seis meses consecutivos de caída en términos interanuales en el contexto de una comercialización complicada tras una vendimia con una de las mayores producciones de las últimas décadas. En los seis primeros meses del año, las bodegas y cooperativas provinciales han facturado 174,35 millones de euros en el extranjero, en torno a un 20 por ciento menos de lo que sumaron en el pasado ejercicio, en ese mismo periodo, cuando superaron los 219,76 millones de euros.

En la caída le ha acompañado el segundo de los sectores que potencia de manera habitual los números exportadores del territorio ciudadrealeño, aunque en este caso ese descenso es mucho más moderado. Se trata de los materiales plásticos y sus manufacturas, dentro de los cuales destacan los productos de etileno, propileno y poliacetales, cuyas ventas exteriores han ascendido a 174,29 millones de euros en los seis primeros meses de este año, lo que supone una caída del 1,18 por ciento con respecto al mismo periodo de 2018.