Pedro Madrid afrontaba su primera campaña como técnico del Almagro FSF, un conjunto que tras acariciar el sueño del ascenso a Primera División hace dos temporadas, seguía peleando por disputar un nuevo play off. Cuarto a tres puntos del tercero y a seis del primero y el segundo en el Grupo IV de Segunda Femenina, el conjunto encajero vive también días de incertidumbre sobre cómo podrá resolverse la campaña. 

El  técnico es claro y asegura que el deporte ahora «queda en un segundo plano. Lo primero es la salud». De profesión maestro, está intentando también reinventarse y se mantiene en contacto con sus alumnos para intentar desarrollar el curso con una relativa normalidad.

También se mantiene al habla con sus jugadoras, a las que la preparadora física programó un plan hasta Semana Santa. «Se trata más que nada de mantener la forma porque lo esencial es el trabajo de pista, que es lo que te da ese punto», matiza.

Sobre el futuro de las competiciones, se remite a la comparecencia del presidente de la Federación Española de Fútbol, Luis Rubiales, en la que avanzó que en ligas como la Segunda Femenina de fútbol sala la intención es concluirlas. «Será complicado porque no veo en esta categoría jugando bien entrado el verano o disputando dos partidos por semana. Para nosotros es un hobby, una afición. Si no se sabe lo que va a pasar en la Primera División de fútbol, imagina nosotros».

Entiende que cada club adopte la postura que más le convenga, pero lamenta que «estos siete meses de trabajo se puedan ir por la borda.  Hay que entender todas las posturas y nosotros aceptaremos lo que se nos diga». Lo que tiene claro es que reanudar la competición con partidos a puerta cerrada «no tendría ningún sentido».

«Lo mejor sería que la decisión que se tome sea cuanto antes para que los equipos podamos planificar lo que sea», apostilló, y aseguró estar muy satisfecho y agradecido con la junta directiva, plantilla y afición.