La polémica sobre el coste de la producción de uva para vinificación ha caldeado mucho los ánimos durante la primera mitad de la cosecha del año 2020 en Castilla-La Mancha, entre acusaciones contra las principales bodegas por pagar, según las organizaciones agrarias, precios muy inferiores a los costes reales que soportan los agricultores pero ¿de dónde proceden las cifras utilizadas por Asaja o UPA en esta controversia?

La respuesta exacta a esta pregunta proviene de la Universidad Politécnica de Valencia (UPV) y de su Departamento de Ciencias Económicas y Sociales que, por encargo de la Organización Interprofesional del Vino (OIVE), ha elaborado el Estudio de los costes de producción de uva para la elaboración de vino en nuestro país, bajo la dirección del Doctor Ingeniero Agrónomo, Raúl Compés.

En este estudio se recogen todas las cifras escuchadas desde el inicio de la vendimia y durante las movilizaciones en las zonas vitícolas más importantes de nuestra región. El trabajo se campo se hizo en la campaña anterior, la de 2019, y calcula los costes medios por hectárea (2.676 euros) y por kilogramo (0,27 euros) para toda la comunidad autónoma. Esto significa entre otras cosas que nuestra región está en la parte más baja de la tabla, pues sus 0,27 euros solo se sitúan por encima de los 0,26 euros de Extremadura, según las tablas recogidas en el trabajo.