La región suma 14 accidentes laborales mortales hasta junio

La Tribuna
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CCOO apunta casi 10.000 incidentes en el primer semestre. Guadalajara, Cuenca y Toledo son las tres provincias españolas con peores datos. «La siniestralidad en el trabajo es el peor indicador sociolaboral en Castilla-La Mancha», explica el informe

La región suma 14 accidentes laborales mortales hasta junio

La siniestralidad laboral sigue creciendo en Castilla-La Mancha que se encuentra a la cabeza del país en este indicador. «Somos la comunidad autónoma con un mayor índice de incidencia, 298,8 accidentes laborales por cada 100.000 trabajadores», explica CCOO de Castilla-La Mancha en una nota de prensa. En el mismo periodo del año pasado este índice de incidencia fue de 223,8.

A nivel nacional el índice de incidencia de enero a junio de este año ha sido de 206,1, mientras que en 2020 fue de 177,9.

Por provincias, según los datos del Ministerio de Trabajo y Economía Social, el índice de incidencia es de: 260,2 en Albacete (194,2 en el mismo periodo de 2020); 278,3 en Ciudad Real (192,5); 323,9 en Cuenca (248,7); 344,7 en Guadalajara (284,8) y 313,3 en Toledo (231,8). Guadalajara sigue siendo la provincia con peores datos de la región y del país; le siguen Cuenca y Toledo como la segunda y tercera provincias con peores indicadores en términos de incidencia.

En números absolutos, entre enero y junio de este año se han registrado un total de 13.555 accidentes de trabajo con baja en Castilla-La Mancha: 12.489 en jornada (12.385 leves, 90 graves y 14 mortales) y 1.066 in itinere (1.047 leves, 15 graves y cuatro mortales).

Por provincias, el total de accidentes ha sido de 2.347 en Albacete (dos mortales); 2.895 en Ciudad Real (seis mortales); 1.528 en Cuenca (ninguno mortal); 2.130 en Guadalajara (dos mortales); y 4.655 en Toledo (ocho mortales).

En el primer semestre de 2020 se registraron un total de 9.689 accidentes de trabajo en la región: 9.030 en jornada (8.926 leves, 77 graves y 27 mortales) y 659 in itinere 8.644 leves, 14 graves y uno mortal).

En el desglose por provincias en 2020 en el periodo analizado hubo 1.718 accidentes en Albacete (dos mortales); 1.926 en Ciudad Real (siete mortales); 1.146 en Cuenca (diez mortales); 1.630 en Guadalajara (dos mortales); y 3.269 en Toledo (siete mortales).

En este primer semestre del año ha habido un incremento de la siniestralidad laboral en prácticamente todos los sectores, siendo la rama de actividades sanitarias la que más ha aumentado su siniestralidad laboral con respecto a 2020.

En cambio ha habido un descenso con respecto a los accidentes laborales mortales registrados en el primer semestre de 2020 (un total de 28).

Un año que pese al parón de la actividad económica por el confinamiento y por la crisis generada por la Covid-19 fue especialmente trágico en materia de siniestralidad laboral, con un incremento del 44% en el número de accidentes mortales en jornada. CCOO regional recuerda que en todo el año 2020, 52 personas trabajadoras fallecieron en accidente laboral en nuestra región, frente a los 39 de 2019.

«La siniestralidad en el trabajo es el peor indicador sociolaboral en Castilla-La Mancha», denuncia Raquel Payo, secretaria regional de Diálogo Social, Política Institucional y Salud Laboral de CCOO de Castilla-La Mancha, quien insiste en que «la herramienta principal para atajar esta lacra es más y mejor prevención de riesgos laborales en las empresas». Todos los accidentes laborales son evitables, siempre y cuando existan unas medidas preventivas en los centros de trabajo que los eviten y aquí la responsabilidad recae en el empresariado que tiene la obligación por ley de salvaguardar la salud y seguridad de las y los empleados que trabajan en sus empresas.

El gran reto en materia de seguridad y salud laboral para CCOO regional es combatir la siniestralidad laboral. Para ello, «seguimos trabajando día a día para acabar con las cifras negras que sigue registrando Castilla-La Mancha, asesorando e informando a los trabajadores y trabajadoras, formando a nuestros delegados y delegadas, exigiendo a las empresas que cumplan con la prevención, denunciando los incumplimientos o pidiendo también a las administraciones que sean ambiciosas en seguridad y salud laboral».

Mejorar la seguridad y salud laboral «es compromiso de los distintos agentes que estamos involucrados en ello». Para el sindicato esto es una prioridad «dentro de nuestra acción sindical, porque estamos hablando de la salud y de la vida de las personas», concluye Payo.