El presidente de Castilla-La Mancha, Emiliano García-Page, fue uno de los interpelados ayer por la líder de Ciudadanos, Inés Arrimadas, que anunció por la mañana su intención de contactar con los barones del PSOEpara pedirles que frustren la investidura. Page dio a conocer por la tarde que había recibido la llamada y que le había trasladado su convicción: «No conviene que el Gobierno de España depende de independentistas». Así lo aseguró en una actualización de su cuenta de Twitter, en la que también explicó que había pedido a Arrimadas la colaboración de su partido: «Le he pedido que los diputados de Ciudadanos faciliten la investidura del ganador de las elecciones». «Como ya hizo el PSOEen 2016 y como debería hacer el PP». 

Por la mañana el secretario de Organización del PSOE castellano-manchego, Sergio Gutiérrez,  manifestó que Page tendrá dos posicionamientos sobre el contenido del acuerdo entre PSOE y Ezquerra Republicana, el primero como presidente «defendiendo los intereses de su tierra» y el segundo para defender «la igualdad entre todos los territorios y todos los españoles». En este sentido, afirmó que Page y el PSOE regional «realizarán una valoración si Castilla-La Mancha se ver perjudicada por la negociación de la investidura». «Pero hasta ahora no tenemos más información», afirmó.