El centro de Inspección Técnica de Daimiel comienza a notar que la afluencia de vehículos se está normalizando paulatinamente. Tras su reapertura el pasado mes de mayo, durante las primeras semanas de la desescalada fueron muchos los automóviles que acudieron hasta el lugar para poder cumplimentar la renovación de su ITV pero, poco a poco, este tráfico ha ido cesando hasta llegar casi al que podría ser el habitual, como han asegurado desde el servicio en la localidad.

Con este objetivo, el Gobierno Central ha ido adaptando los plazos en función de la fecha en la que cada vehículo vio su ITV vencida durante el estado de alarma. Las prórrogas se han concebido en tramos escalonados, siendo de 45 días tras el fin del estado de alarma, para aquellos cuya ITV venció entre el 14 y el 20 de marzo, y de hasta 210 días para aquellos cuya ITV venza entre el 29 de mayo y 5 de junio, cuyo plazo se extendería hasta enero de 2021.

Por otro lado, para los vehículos cuya inspección caducase entre el 21 de junio (fecha en la que concluyó el estado de alarma) y el 31 de agosto, el Gobierno ha decretado una prórroga de tres meses. No obstante, la nueva caducidad tendrá como referencia aquella en la que debería haberse cumplido de manera original. Además, desde el Ministerio de Transportes también han indicado que durante esta prórroga, tendrán preferencia para superar la revisión los vehículos de transportistas profesionales.

Según explicaba una de las responsables del centro daimieleño, a estas medidas se han sumado otras normas de seguridad como la limitación de aforo, tanto en las oficinas como en las instalaciones de inspección, o la obligatoriedad de pedir cita previa, así como el uso obligatorio de mascarilla.