El Consejo de Ministros ha aprobado la declaración de Castilla-La Mancha como ‘zona afectada gravemente por una emergencia de protección civil’, en atención a los daños sufridos por la tormenta de nieve generada por la borrasca Filomena y la posterior ola de frío.
El acuerdo contempla desde ya ayudas destinadas a paliar daños personales, en concreto para los supuestos de fallecimiento y de incapacidad causados directamente por el temporal de nieve y frío. También es posible solicitar compensación por los daños materiales en viviendas y enseres, así como en establecimientos industriales, mercantiles, agrarios, turísticos y de otros servicios. Todas estas ayudas estarán exentas del Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas (IRFP).
Asimismo, las corporaciones locales podrán ver resarcidos los gastos acometidos para hacer frente a la situación de emergencia y subvencionadas aquellas actuaciones inaplazables realizadas para garantizar la vida y seguridad de las personas y el funcionamiento de los servicios públicos esenciales. Y se establece una subvención de hasta el 50 por ciento de su coste a los proyectos que ejecuten los ayuntamientos, mancomunidades y diputaciones provinciales para reparar o restituir infraestructuras, equipamientos o instalaciones.
Esta medida llegaba apenas un par de horas después de que el Consejo de Gobierno instara a Moncloa a que declarase como ‘zona catastrófica’ a aquellos municipios «afectados gravemente» por la borrasca Filomena, que desde el pasado 7 de enero azota a la región en forma de nieve, hielo y temperaturas extremas.
El consejero de Hacienda y Administraciones Públicas, Juan Alfonso Ruiz Molina, recuerda en que son los ayuntamientos los que deben ahora concretar esta petición al Gobierno central, si bien ya avanza que la Junta colaborará con ellos en la elaboración de los expedientes que les sean requeridos. Hasta el momento, medio centenar de municipios lo habrían solicitado, la mayoría de las provincias de Toledo y Guadalajara.
Ruiz Molina recalca que con esta petición a Moncloa «se materializa el compromiso que había adquirido el presidente Emiliano García-Page con los municipios de la región» días atrás. Es más, «incluso nos hemos adelantado», ya que normalmente esta petición se realiza una vez ha pasado todo. Algo que, a todas luces, no ocurre aún en Castilla-La Mancha, donde este martes aún seguía activado el nivel 2 de alerta y efectivos del Ejército de Tierra y de las brigadas antiincendios del Estado siguen trabajando en la retirada de nieve y hielo.
De momento, la Junta prefiere no mojarse a la hora de evaluar económicamente los daños, entre otras cosas porque en muchos casos estos aún se desconocen, ya que ni la nieve ni el hielo han sido aún retirados, según advierte el consejero.