Era su gran objetivo de esta parte de la temporada, pero el extravío de su equipaje, incluido la de su silla de atletismo, ha impedido a Gustavo Molina participar en el Maratón de Duluth (Estados Unidos). 

El deportista infanteño afincado en Poblete, tras un agotador viaje de 29 horas, llegó a Duluth sin su equipaje, «que supuestamente se quedó en Chicago», ha confirmado a este periódico. Dado que la compañía implicada no le ha dado soluciones, Gustavo Molina ha tenido que resignarse a no competir en este Maratón de Duluth, en el que esperaba rebajar su marca personal en esta distancia, que sigue en 1:42.43. Incluso no descartaba bajar de una hora y 40 minutos, por lo que había hecho una apuesta de afeitarse la barba que le acompaña ya desde hace dos años si lo lograba.

Molina estudiará ahora solicitar algún tipo de indemnización por los daños causados, «aunque sé que es difícil. Lo primero de todo es recuperar la silla de atletismo», ha comentado.

Conseguir una buena marca en este Maratón de Duluth era muy importante para él, debido a que podía abrirle la puerta en forma de invitación para otras prestigiosas pruebas, como las de Berlín, Nueva York o Boston. Además, toda su preparación estos meses había estado enfocada a esta carrera.