Confesó en Barajas que los 7 kilos de 'coca' iban a Infantes

Pilar Muñoz
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Declara el agente que la detuvo en el aeropuerto de Baraja y los guardias civiles, que aseveran que el tráfico de drogas es el 'modus vivendi' de los tres encausados

El instructor de la operación ‘Jarete’ durante su informe ante el Tribunal de la Sección Primera de la Audiencia. - Foto: Rueda Villaverde

La 'mula' confesó en el Aeropuerto de Barajas (Madrid) que los casi siete kilos de cocaína que traía de Colombia iban para Villanueva de los Infantes, ha atestiguado el agente que la detuvo el 24 de abril de 2016 tras desembarcar de un vuelo procedente de Cali.

Esta mujer de iniciales Y. C. había sido contratada para traer la droga a España y ser transportada a Villanueva de los Infantes, a la vivienda de María Leyda M.O., que se sienta en el banquillo de los acusados de la Audiencia de Ciudad Real junto a su hijo Carlos Andrés M. O. y su pareja José Luis S. L. La madre y el hijo están acusados de tráfico de drogas y blanqueo de capitales, delito que también se le imputa a la pareja de la encausada, considerada la cabecilla de la organización.

La ‘mula’ (persona que transporta la droga) fue detenida en Barajas cuando pretendía entrar en España con 6,8 kilos de cocaína ocultos en el interior de sus maletas, en un doble fondo, y en otros hechos en ocho unidades de zuecos de mujer de plataforma alta. «Se le condenó a tres años de cárcel», indicó el agente por videoconferencia en el juicio que se sigue en la Audiencia Provincial por los hechos destapados en 2016, aunque la familia de María Leyda M. estaba en el punto de mira de la Guardia Civil desde 2008, según las manifestaciones de los agentes que intervinieron en las actuaciones llevadas a cabo.

«No tienen otro modus vivendi que el tráfico de drogas», aseguró ante el Tribunal el instructor de las diligencias, quien añadió que desde 2008 se dedican a vender drogas en Valdepeñas y Villanueva de los Infantes, entre otros municipios de la comarca.

A preguntas de la abogada de María Leyda M., el instructor dijo que la acusada era la cabecilla y su pareja José Luis S. «un mero colaborador» que prestaba apoyo logístico al grupo. Carlos Andrés M., el hijo de la encausada, se encargaba de recibir, preparar y transportar la cocaína. «Era el vendedor» y también hacía envíos de dinero a Colombia, lavado de dinero que ha negado, como también su madre y la pareja de ésta. «Todos tenían un papel dentro de la organización»,  remarcó el jefe del operativo tras hacer hincapié en el lenguaje «convenido» que utilizaban en prevención por si estaban siendo escuchados.

La abogada de la defensa incidió en que eran «interpretaciones» de los agentes y también recalcó que los envíos de dinero eran para la plantación de piña que su cliente tiene en Colombia. «No tengo conocimiento de la existencia de esta plantación. En Colombia llevaban un nivel de vida más alto que en España», afirmó el instructor resaltando que la información la tenían de las autoridades del país.

La letrada cuestionó el aludido nivel de vida señalando que su cliente es «viuda de un español y tiene una pensión, una ayuda por el accidente que sufrió su hija y el salario de su pareja». Sin embargo, el guardia civil insistió en que sólo le han visto trabajar esporádicamente y no alcanzan a comprender cómo puede vivir una familia numerosa con una pensión y un jornal pequeño y mandar importantes cantidades de dinero a Colombia.

Punto de venta. En el registro efectuado en la casa de María Leyda M. en Villanueva de los Infantes, los agentes de la Guardia Civil hallaron casi 18.000 euros en fajos de billetes envueltos en plástico film de cocina. «Había tres paquetes, uno en la mesita de noche; y también más de 5.000 euros en un pantalón», declaró uno de los agentes que intervino en el registro. La casa de la encausada «era un punto de venta de drogas».

«¿Cuántas personas vivían en la casa?», «¿Cómo pueden saber que María Leyda vendía drogas?» «¿Sabe para qué se usa la acetona?, ¿Saben que estaban en obras?, preguntó la letrada de la defensa tras poner en tela de juicio las actuaciones de los agentes, que se mantuvieron firmes por la investigación, la droga, elementos y dinero incautados.